Un centenar de municipios del país que durante los últimos 30 años fueron severamente golpeados por el conflicto armado, y donde los índices de pobreza y desigualdad son alarmantes, se beneficiarán de inversiones por un poco más de 14 billones de pesos a través de los Contratos Plan para la Paz.
Así lo anunció hoy el Departamento Nacional de Planeación (DNP), precisando que se trata de la ejecución de unas 1.450 obras prioritarias en educación, salud, vías, agua potable, alcantarillados, redes eléctricas, vivienda urbana y rural, deporte y recreación, cultura y turismo, lo mismo que infraestructura para el desarrollo agropecuario.
Esta nueva generación de Contratos Plan, denominada Contratos Paz, está siendo liderada por el director del DNP, Simón Gaviria, quien advirtió que la construcción de una paz estable y sostenible implica una transformación del país desde las regiones.
“Con los Contratos paz se dará lugar a un renacer de comunidades que han estado sumidas en la violencia y el conflicto, haciendo de la inversión pública un instrumento eficiente para la superación de la pobreza y el cierre de brechas entre las regiones del país”, declaró.
El primer Contrato Plan para la Paz, de los ocho que está estructurando el DNP, se implementarán en los Montes de María, esa emblemática región ubicada en la parte central de los departamentos de Bolívar y Sucre, azotada hasta hace muy poco por la violencia.
Allí se han identificado 270 proyectos de alto impacto económico y social que implicarán inversiones del Gobierno nacional, las gobernaciones y los 17 municipios de la zona, por 2,3 billones de pesos.
Los restantes siete Contratos Plan para la Paz se implementarán en Norte de Santander, especialmente en la región de El Catatumbo, en los departamentos de Meta-Caquetá-Guaviare, Putumayo, Amazonas, Guajira, Macizo del Cauca y Valle del Cauca.
En los departamentos de Meta-Caquetá-Guaviare se registran los peores indicadores sociales del país, toda vez que la pobreza en este territorio desborda el 35 por ciento y la cobertura en agua potable, salud, educación media y vivienda es crítica.
Con esta nueva generación de Contratos Plan el DNP avanza en la reducción de la pobreza, la profundización de la descentralización y el mejoramiento en la calidad del gasto público.
Los Contratos Plan, que fueron creados hace cuatro años por el DNP han permitido canalizar recursos por 14,3 billones de pesos, que están beneficiando a los habitantes de los departamentos de Santander, Boyacá, Tolima, Cauca, Choco, Antioquia, Córdoba y Nariño.
Al principio la expresión Contratos Plan no significaba mucho, pero hoy en día una gran parte de la población colombiana la asocia con colegios, hospitales, vías, acueductos, redes eléctricas, agroindustria, viviendas, turismo y centros de desarrollo infantil.
Los Contratos Paz, explicó Gaviria, están orientados justamente a la articulación de los diferentes niveles de gobierno en el propósito de emprender a la mayor brevedad las grandes obras infraestructura económica y social que demandan las poblaciones de los territorios con mayor afectación por el conflicto armado interno.