El hacinamiento en centros de detención temporal amenaza con frenar nuevas capturas en varios puntos de Colombia, alertó la fiscalía en una carta divulgada este martes.

El fiscal general Néstor Humberto Martínez abogó por medidas urgentes para solucionar la "grave situación de hacinamiento" en las "Unidades de Reacción Inmediata (URI)".

A esos centros son trasladadas las personas capturadas en flagrancia o por orden judicial antes de comparecer ante un juez.

En la misiva al director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), general Jorge Luis Ramírez, el fiscal asegura que esos sitios "ya han superado en más del cien por ciento" su capacidad.

Aunque la justicia ordene prisión, los detenidos permanecen en las URI ante la falta de espacio en las cárceles, lo que además ha desencadenado "inseguridad" y "problemas de salubridad", señala la carta conocida por la AFP. 

"En total se encuentran 1.023 personas privadas de la libertad en las salas de paso (...) y solo se tiene capacidad para alojar 663", agrega el documento.

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A raíz de ello, la fiscalía advirtió que "en estos momentos será imposible" que pueda seguir llevando a cabo capturas en nueve de los 32 departamentos, incluidos Nariño y Norte de Santander, fronterizos con Ecuador y Venezuela, respectivamente. 

Este mismo martes el viceministro de Justicia, Juan Francisco Espinosa, anunció "decisiones inmediatas" que impidan "paralizar las capturas por parte de la fiscalía".

Según cifras del Inpec de febrero de este año, Colombia tiene un índice de hacinamiento del 44,9% en centros penitenciarios. 

Las cárceles del país registran 115.488 internos, pero sólo tienen cupos para 79.723, lo que se traduce en una sobrepoblación 35.765 personas.