A inicios de septiembre la justicia argentina fijó para el 26 de febrero de 2019 el primer juicio oral por corrupción en contra de la expresidente Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015). La exmandataria y actual senadora es acusada por supuestamente dirigir una asociación ilícita y fraude en la adjudicación de obras públicas viales al Grupo Austral en la provincia de Santa Cruz, al sur del país, en la denominada causa (proceso) conocido como ‘Vialidad’.
El panorama de la expresidente se tornó más sombrío este lunes, después de que el juez federal Claudio Bonadio la procesara con prisión preventiva por otra causa, la de los ‘cuadernos de la corrupción’.
Este martes, en respuesta, Fernández aseguró, mediante un documento presentado a Bonadio, que “podrán escuchar de manera clandestina mis conversaciones telefónicas o excavar toda la Patagonia argentina o donde mejor se les ocurra, que nunca van a encontrar nada con lo que involucrarme”.
No obstante, la inflexible versión de Cristina se pone en tela de juicio teniendo en cuenta que este no es el único caso que enfrenta. Otros seis procesos la tienen en aprietos.
Causa de los cuadernos
Esta indagación empezó a inicios de 2018, a partir de unas fotocopias de anotaciones de supuestos sobornos que habría realizado Oscar Centeno, quien fue chofer de Roberto Baratta, el ex subsecretario del Ministerio de Planificación.
Los ocho cuadernos contenían información sobre viajes hechos entre 2005 y 2015 para recoger y entregar dichos sobornos.
El juez Bonadio sostiene que se trata de una “organización delictiva” liderada por la exjefa de Estado y conformada por varios funcionarios para la “percepción de sumas de dinero ilegítimas por parte de diversos particulares”, muchos de ellos contratistas de obras públicas. En este proceso, en el que hay 42 personas procesadas, la exmandataria está investigada como jefa de asociación ilícita, por lo que se solicitó su prisión preventiva.
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Dólar futuro
La causa tiene que ver con venta de dólares a futuro a un precio menor que en el mercado. En este tipo de transacciones se realizan contratos a futuro de compra-venta de divisas (entre otros) acordando precios, cantidades y fechas de vencimiento.
En resumen, dos partes pactan un precio (de compra y de venta) de dólar en una fecha futura y se comprometen a mantener los montos. Además, no hay intercambio físico de moneda, sino que se compensan las diferencias entre los precios al momento de que venza el arreglo. Los ingresos (o egresos, dependiendo de la posición de las partes) provienen del ajuste de dichas diferencias.
Por haber vendido dólares a futuro a un precio más bajo que en el mercado, Cristina fue procesada por administración fraudulenta y perjuicio de la administración pública.
Se estima que las pérdidas para el Banco Central de Argentina (BCA) por esta operación, que se dio entre febrero y junio de 2015, oscilan entre los ARS 50.000 millones y los ARS 55.000 millones, es decir, entre cerca de USD 1.270 millones y USD 1.400 millones.
En esta causa están imputadas otras 14 personas, incluidos el exministro de Economía, Axel Kicillof, y el expresidente del BCA, Alejandro Vanoli.
Claudio Bonadio envió este caso a juicio oral en marzo de 2017, pero no se ha determinado fecha para el mismo.
Pacto con Irán o causa AMIA
Se trata del supuesto encubrimiento por parte del Gobierno de CFK, a través de un acuerdo diplomático con Irán, de los iraníes acusados de ejecutar un acto terrorista contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires, en 1994, en el que murieron 86 personas y 300 argentinos resultaron heridos.
En febrero de este año el juez Bonadio llamó a juicio oral a la expresidente por haber avalado el memorándum para dotar de impunidad a los acusados. Al juicio también fueron llamados el exministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman; el exsecretario legal, Carlos Zannini; y el exdirector general de la Agencia Federal de Inteligencia, Oscar Parrilli, entre otros.
El envío a juicio de este caso se dio tres años después de que el fiscal Alberto Nisman -a cargo de la investigación del atentado y quien fue asesinado- acusara a la exmandataria, procesada por los delitos de estorbo de un acto funcional, abuso de autoridad y encubrimiento agravado. Aún no hay fecha para el juicio, pero se prevé que sea para inicios de 2019.
Los Sauces
Es un entramado de operaciones inmobiliarias “con retornos” en el que está implicada la inmobiliaria de Cristina y de sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner. Los Sauces SA, creada en 2006, es investigada por supuesto lavado de dinero.
Según las indagaciones, dicha sociedad habría sido usada para cobrar precios mayores a los del mercado por alquileres y ventas de sus hoteles e inmuebles, a cambio de otorgamiento de contratos y favores del Estado. Empresarios amigos del Kirchnerismo habrían realizado pagos a la exmandataria a través de esta figura.
La expresidente fue sentenciada por asociación ilícita y lavado de activos. Además, a ella y a Máximo les fue embargada una suma de ARS 130 millones, mientras que para Florencia el embargo fue de ARS 100 millones.
Hotesur
Es similar a Los Sauces. El uso de hoteles de “Hotesur” (sociedad en la que es accionista Cristina) para recibir dineros a cambio de adjudicación de contratos estatales. La exjefa de Estado y sus hijos fueron procesados por lavado de dinero, sin prisión preventiva. Lo que señalan las autoridades judiciales es que se alquilaban las habitaciones de los hoteles de la familia Kirchner sin ser ocupados. El lavado de dinero se configuraría a través de sobrecostos de las obras públicas otorgadas.
El embargo en este caso asciende a ARS 800 millones (USD 20,3 millones). La empresa está intervenida en la actualidad.
La ruta del dinero K
En abril de 2013 se conoció que el empresario Lázaro Báez, amigo del matrimonio Kirchner, sacó de Argentina EUR 55 millones. El destino de la millonaria suma eran paraísos fiscales en Europa.
Las investigaciones señalaban que la mencionada ruta empezaba en Río Gallegos (una ciudad al sur de la Patagonia), hacía escala en Buenos Aires o en Uruguay, y continuaba hacia cuentas en Suiza. El dinero era enviado en vuelos nocturnos y en billetes de EUR 500, según las versiones del periodista Jorge Lanata, quien destapó el hecho. Cristina fue mencionada en estructuras de lavado de dinero por Leonardo Fariña, un financiero que está detenido desde 2015.
Cristina Fernández de Kirchner ya tiene medidas de prisión preventiva pero continúa en libertad debido a los fueros que le otorga su cargo de senadora de la República. Su eventual arresto dependerá de que dos tercios de los senadores aprueben su desafuero.