Muchas veces, se dedica al cuidado del rostro menos atención de la que se debería. Sin embargo, para lucir una piel radiante hay ciertas rutinas esenciales, y una de ellas es una correcta higiene facial.
“La base de una piel bonita y saludable es la limpieza, por eso siempre tiene que ser el primer paso del ritual. Por la mañana, la higiene facial nos ayuda a eliminar los restos de los productos que hemos aplicado por la noche, así como el sudor y demás toxinas que la piel puede tener. Por la noche, la limpieza es importante, tanto si te maquillas como si no lo haces, para eliminar los restos de los productos, así como las partículas de contaminación, el sudor y la suciedad que la piel acumula”, afirmó la farmacéutica Rocío Escalante.
Qué productos utilizar
En líneas generales, para las pieles secas y sensibles es preferible utilizar una leche limpiadora, y evitar los productos que se enjuagan con agua. Una opción también adecuada es el agua micelar. En las pieles maduras son recomendables leches o productos hidratantes.
Para las pieles grasas y con tendencia al acné, se deben elegir productos no comedogénicos y oil free que ayuden a limpiar la piel de forma suave, sin agredir. Para las pieles mixtas se pueden utilizar mousse, espumas y geles faciales que sean también oil free.
Errores en la rutina
- Utilizar agua caliente o muy fría. Lo ideal es optar por agua templada a la hora de lavarse la cara.
- Frotar la piel muy fuerte. La limpieza hay que hacerla siempre de forma suave, sin presionar mucho. Es un error habitual, sobre todo en pieles grasas, querer eliminar el sebo frotando fuerte y lo único que se consigue es un efecto rebote. A la hora de secar, también hay que evitar frotar la piel y hacerlo a toques con una toalla limpia que solo se destine para la cara.
- Abusar de las toallitas desmaquillantes. Es mejor dejarlas para momentos esporádicos y utilizar geles y limpiadores a diario.
- No eliminar bien los residuos. Es importante aclarar bien el rostro después de haber aplicado el limpiador.
- Olvidarse del tónico. El tónico no solo sirve solo para eliminar los restos del maquillaje o del producto limpiador que haya usado, su objetivo es equilibrar el pH de la piel.