Polémica por propuesta de Metro regional Bogotá-Cundinamarca | El Nuevo Siglo
El exalcalde Enrique Peñalosa y el gobernador Nicolás García hicieron pública su contradicción en torno al proyecto de ampliar el Metro de Bogotá a toda la Sabana. /Diana Rubiano, Presidencia y Xinhua
Foto Diana Rubiano, Presidencia y Xinhua
Viernes, 11 de Diciembre de 2020
Redacción Política

Cuando esta semana la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, anunció la salida del gerente del Metro de Bogotá, expresó que “de común acuerdo con el Gobierno nacional y la junta hemos decidido hacer un cambio en la gerencia y estructura de la empresa”.



Esa restructuración, explicó después, implica que la empresa "no solamente será de la primera línea, sino del Metro regional, que tendrá que integrarse en una sola tarifa a los Regiotram que se están construyendo".

Horas después el antecesor de López, el exalcalde Enrique Peñalosa, trinó que “los concejales deben estar atentos para que con empresa regional que anuncia alcaldesa, bogotanos no terminen subsidiando transporte de otros municipios, como Regiotram Occidente que tendrá enormes pérdidas operacionales, especialmente si se contabiliza depreciación, como debe hacerse”.

La declaración fue interpelada por el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, quien le dijo a Peñalosa que “posiciones cómo la que usted plantea levantan muros, cuando el desarrollo y el progreso llegan a través de puentes. Lo invito a ver más allá de las fronteras y entender que Bogotá y Cundinamarca se necesitan y que juntas son más fuertes y competitivas”.

“A mí no me gusta Transmilenio, pero sé que es necesario y además complementario dentro del modelo de transporte que requiere la región. Para avanzar se requiere visión y objetividad”, anotó.

“De acuerdo gobernador”, respondió Peñalosa, “pero en Bogotá hay comunidades más pobres en Ciudad Bolívar, Usme, etc., que en Faca, Mosquera, Chía o Sopó, donde irán los Regiotram. Bienvenida la armonía, pero no con impuestos bogotanos subsidiando lo que no les corresponde para que alcaldesa haga política”.

García ripostó señalando que “jamás el departamento le ha pedido a Bogotá subsidiar a los cundinamarqueses” y añadiendo que “eso solo está en su cabeza y en sus acciones de años que buscaron impedir que Regiotram se realizara porque quería Transmilenio hasta Facatativa y acabar corredores férreos, no lo logró”.

“No más fronteras. Qué avancen los grandes proyectos, la visión amplia y objetiva, el progreso y desarrollo regional. Cundinamarca tiene mucho que ofrecer, seguiremos trabajando en equipo con la Nación y el Distrito buscando unir y no dividir a los habitantes de la región”, precisó el mandatario cundinamarqués.



¿Candidato?

En los opinaderos políticos se especula sobre el significado de las cada vez más frecuentes intervenciones de Peñalosa, porque esta vez el intercambio de tuits fue con el gobernador García, pero se han dado con la alcaldesa López, pero sobre todo con el senador Gustavo Petro, de Colombia Humana, de quien Peñalosa fue sucesor como huésped del Palacio Liévano.

Paradójicamente, muchos de los cruces de comentarios entre Peñalosa, López y Petro son sobre si hay continuidad o fractura entre las tres administraciones.

Para algunas fuentes de EL NUEVO SIGLO el exalcalde Peñalosa podría estar sopesando la posibilidad de una candidatura, aunque entre ellas difieren sobre cuál sería el cargo al que aspiraría, pues mientras unas le apuestan a un retorno al Partido Liberal para ser una de sus cartas presidenciales, otras lo ven queriendo volver a la Alcaldía de Bogotá, para el que eventualmente sería su tercer mandato.

Sobre el primer tema, se dice que la baraja de posibles precandidatos liberales carece de una figura reconocida, condición que podría ser aportada por Peñalosa, quien por otra parte se ha alejado bastante de la Alianza Verde (colectividad de la alcaldesa López), a pesar que en esa colectividad todavía existe un sector peñalosista, toda vez que fue protagonista junto a los también exalcaldes Antanas Mockus y Luis Eduardo Garzón de la transformación de esa organización política de Opción Verde a Partido Verde; como se sabe, el distanciamiento se fue profundizando, pero comenzó con el arribo de numerosos cuadros petristas, por ese entonces amparados bajo el movimiento Progresistas, pasando de Partido Verde a Alianza Verde.

Acerca de volver a lanzarse como candidato a la Alcaldía de Bogotá, por una parte podría decirse que sería una aspiración muy tempranera, ya que López apenas va a cumplir un año de gestión, pero por otra las nominaciones podrían anticiparse: como se sebe desde el 23 de noviembre empezó un proceso para revocarle el mandato, argumentando incumplimiento a lo prometido, como es el caso del Corredor Verde de la Séptima que tendrá un carril para los buses duales que ya circulan por esa vía (aunque los de ahora, a gasolina y gas, se remplazarían por eléctricos); ese carril se ha asimilado a una troncal de Transmilenio, lo que por supuesto ha sido uno de los temas de polémica entre Petro y Peñalosa.



Metro regional

Entre tanto, la semana pasada el gobernador García, la alcaldesa López y la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, firmaron los convenios interadministrativos Conectividad del Occidente, Regiotram del Norte, Regiotram de Occidente y Accesos Norte II.

Según lo informó la Alcaldía de Bogotá, con estos convenios se sumarán esfuerzos para lograr la red de Metro regional y mejorar las vías que conectan a Bogotá con la región. Se tratará, además, de un sistema de transporte multimodal, sostenible e incluyente que, en el caso de los Regiotram del Norte y Occidente, se sumarán a los 24 kilómetros de la Primera Línea del Metro, a su segunda fase y además conectarán con Transmilenio.

Los cuatro convenios, aseguró López, son “fundamentales para que sigamos sumando esfuerzos en beneficio de esta Bogotá-región que es el corazón de Colombia y de la recuperación económica y social que necesitamos. Estos proyectos generan empleo, reducen la pobreza, y nos sacarán adelante con todos los desafíos que tenemos. Somos una misma región y tenemos que lograr que todos nuestros modos de transporte se combinen y complementen para mejorar la movilidad y calidad de vida de todos los ciudadanos”.

Por su parte, García destacó la importancia de estos proyectos que conectarán a Cundinamarca con la capital del país. “Teníamos siempre el compromiso de trabajar de manera conjunta y articulada con la capital, recibimos un proyecto que avanzó, que se materializó y se convirtió en un ejemplo nacional de un sistema de transporte limpio y que va a beneficiar a cientos de miles de habitantes. Aquí seguimos demostrando que cuando trabajamos en armonía y unidos se generan soluciones para todos los habitantes de esta maravillosa región”.



A su turno, la ministra Orozco consideró clave que los gobiernos distrital, departamental y nacional unan esfuerzos para estructurar estos importantes proyectos de infraestructura vial. “Toda esta visión de integración, pensada desde el desarrollo de la movilidad sostenible se enlaza a la perfección con los conceptos de la ciudad para la gente que le apuntan a darle prioridad al transporte público como pilar de la vida urbana, columna vertebral de la movilidad y eje fundamental de la reactivación económica social y ambiental de nuestras ciudades y de nuestro país”.

El convenio Conectividad del Occidente está compuesto por los proyectos: ampliación calle 13, extensión calle 63 hasta Cundinamarca, la vía Alterna de Occidente, ALO centro desde la Calle 13 hasta la Calle 80 y la Perimetral de la Sabana.

Por su parte, el segundo convenio, el de Regiotram de Occidente, busca coordinar las condiciones para que este se articule con el Sistema de Transporte Masivo de Bogotá mediante la integración física, operacional, tarifaria y de medio de pago.

El tercero, modificará el convenio para los Estudios de Factibilidad y la Estructuración del Regiotram Norte, con el fin de que el Distrito entre a formar parte del proyecto y se garantice que desde sus inicios se estructure de forma integrada con para que se complemente con la fase II de la PLMB, mejore la operación del borde oriental, junto al Corredor Verde Séptima y una a Bogotá con Chía, Cajicá y Zipaquirá.
Por último, el convenio Accesos Norte II, busca coordinar esfuerzos para estructurar y contratar la ampliación de la Autonorte, la Séptima y logre la elevación del tramo del Humedal Torca-Guaymaral en la Autopista Norte.