Grupos armados son el cáncer del Catatumbo: Corzo | El Nuevo Siglo
Juan Felipe Corzo, representante por Norte de Santander.
Twitter Juan Felipe Corzo
Miércoles, 23 de Noviembre de 2022
Redacción Política

La región del Catatumbo es una de las que más cultivos ilícitos tiene en el país. No más en el municipio de Tibú hay 22 mil hectáreas.

El representante a la Cámara por Norte de Santander (Centro Democrático), Juan Felipe Corzo, indicó que las inversiones que se hagan en esta región así como la sustitución de cultivos que se plantea el Gobierno nacional, difícilmente podrán ser exitosas mientras persista la presencia de grupos armados organizados

EL NUEVO SIGLO: Siguen creciendo los cultivos ilícitos en Colombia, especialmente en el Catatumbo, según el reciente informe Simci, de Naciones Unidas... 

JUAN FELIPE CORZO ÁLVAREZ: Esta es una problemática que está muy enquistada acá en el departamento desde hace varios años. Creo que ese espacio que le dio el expresidente Juan Manuel Santos a través del proceso de paz, donde no permitió la continuidad de la fumigación, donde se disminuyó la erradicación forzada por parte de la Fuerza Pública, eso sin duda le da un espacio a estos grupos organizados para que puedan a sus anchas continuar con ese negocio tan lucrativo como es el narcotráfico, y en este caso el eslabón más débil que es la siembra del cultivo. 

Creo que a pesar de la desmovilización de varios cabecillas e integrantes de las Farc en ese entonces, pues ahí quedaron las disidencias, quedaron diversos grupos armados organizados, que en esa zona de Norte de Santander están todos: el Eln; están los que provienen de Venezuela, el ‘Clan del Golfo’, los Rastrojos, el Epl. 

Entonces esa es una problemática muy grande. Creo que por más que haya voluntad de paz o diálogos, es un negocio muy lucrativo que los grupos que no tienen ninguna voluntad de paz van a continuar. 

ENS: ¿Ve usted viabilidad en el Catatumbo a la idea que tiene el Gobierno nacional de que la erradicación sea consensuada con los campesinos a través de la sustitución de cultivos? 

JFC: Creo que para lograr una verdadera sustitución voluntaria de cultivos ilícitos por parte de las personas que lo practican, no es solo un tema de diálogo con ellos sino de atención integral. Muchos de ellos ejercen esa actividad, bien sea porque los obligan los grupos armados organizados, pero también hay muchos que lo hacen porque no tienen otra alternativa. 

Se encuentran en la profundidad de la selva del Catatumbo, donde hay un abandono histórico de hace 50 años, que no tienen vías, que no tienen facilidad para comercializar, transportar los diferentes productos. Y en materia de competitividad se encuentran en total desventaja. 

Creo que cultivar productos lícitos en Norte de Santander sin un manejo adecuado, sin insumos agrícolas a un buen costo y todas las garantías que tiene que tener el campo para ser realmente productivo, no va a ser un negocio rentable para los campesinos. 

Por el contrario, los cultivos ilícitos sí lo son porque la manutención de estos cultivos no tiene mayores requerimientos en su cuidado, en su productividad. Simplemente es sembrar y esperar tres meses y medio que crezcan las hojas, raspar, como ellos mismos lo dicen, y esos mismos grupos organizados son los que pasan a recoger el producto. 



ENS: ¿El desarrollo del Catatumbo a dónde debería apuntar?, ¿cuál es la fortaleza de esta región? 

JFC: Es un conjunto de varias cosas, creo que sin duda alguna dar una atención integral del campo, fortalecimiento en lo que es la inversión en infraestructura vial, acompañamiento a los campesinos y agricultores para fortalecer su productividad. 

Pero si persiste la presencia del actuar delictivo de estos grupos armados organizados, difícilmente estas inversiones pueden dar buen resultado. 

Hemos visto cómo se han hecho muchas inversiones en placa huellas, por ejemplo en la vía que corresponde de Cúcuta a Tibú, que llevaba abandonada hace mucho tiempo y el gobierno anterior hizo una inversión de más de $100 mil millones de manera mancomunada con la Gobernación. 

Pero reitero, si continuamos con la presencia de estos grupos delictivos, narcotraficantes y que azotan no solo a la población sino a la Fuerza Pública, a los líderes sociales, a los líderes ambientales, realmente no vamos a poder tener un departamento atractivo para la inversión y para generar cultivos lícitos. 

La presencia de estos grupos es el cáncer que tenemos en el Catatumbo y hasta que no dejen de tener presencia tan fuerte, no vamos a poder ver un Catatumbo productivo y en paz.