El tema del cambio climático no estará en la agenda de la cumbre del G7 en 2020 que se realizará en un club de golf propiedad del presidente estadounidense, Donald Trump en Florida, anunció la Casa Blanca el jueves.
"El cambio climático no estará en la agenda", dijo a los periodistas el jefe de gabinete, Mick Mulvaney.
Trump, un escéptico del clima, retiró a su país del acuerdo de París y ha tomado distancia de todas las iniciativas de combate al calentamiento global en las principales citas internacionales.
Unos devastadores incendios colocaron al futuro de la Amazonía, la selva tropical más grande del planeta, en el centro de las discusiones durante la última reunión de líderes de las principales potencias económicas en agosto en Biarritz, en el suroeste de Francia.
La sede
La idea, que el propio Trump defendió abiertamente durante el último G7 en Biarritz, Francia, había provocado una ola de críticas y preguntas sobre posibles conflictos de interés.
El lugar es el Trump National Doral Club, un resort de lujo en Miami.
"No es el único lugar posible, pero es el mejor", dijo Mulvaney en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
"Hemos utilizado los mismos criterios que los usados por las administraciones anteriores" para la organización de cumbres, aseguró, precisando que se habían estudiado 12 opciones.
"Es un sitio formidable", había afirmado Trump en Biarritz.
"Tiene un área considerable, cientos de hectáreas, por lo que podemos realizar cualquier evento en el lugar", agregó. "Está justo al lado del aeropuerto (...) y cada delegación puede tener su propio edificio".
Minimizando cualquier cuestionamiento ético o legal, Trump había asegurado que con la cumbre no percibiría "nada" de ganancias. "No me importa ganar dinero", agregó, repitiendo un argumento que ha esgrimido varias veces según el cual la presidencia lo ha llevado, más bien, a reducir su fortuna.
Mulvaney dijo que la operación se haría a precio de costo.
Comprado por el magnate en 2012, el Trump National Doral Golf Club se presenta en su sitio en internet como un "oasis tropical" que ofrece más de 600 habitaciones, incluidas dos "suites presidenciales" y un gran salón de baile bautizado como "Donald J. Trump".