El gobierno de Virgilio Barco | El Nuevo Siglo
Sábado, 20 de Octubre de 2018

“Llegó al poder con mayoría convincente”

Un aspecto interesante de “Cambiar el Futuro. Historia de los procesos de paz en Colombia (1981-2018)” (Debate, Penguin Random House, Bogotá, 2017), de Eduardo Pizarro, es el análisis de los recientes ejercicios presidenciales en nuestro país a partir de Julio César Turbay. No se expuso, a plenitud, en esta columna, lo pertinente a Virgilio Barco (VB), se limitó a temas generales y la causa fue el fallecimiento de Charles Aznavour.

En consecuencia, se habló de ambos personajes y continúa lo relativo a VB a partir de cómo se le conoció. Quien escribe se desempeñó como Director General de Aduanas y fue invitado a USA por el State Department y el USA Customs Service; dichas entidades organizaron una reunión social a la cual asistió VB, Embajador de Colombia. Uno de los temas estudiados en la segunda entidad fue el ángulo jurídico en la represión de actividades aduaneras ilegales debido a la nula formación, en tal profesión, de quien escribe.

Ahora se profundiza sobre VB. La primera observación consiste en la creencia de no habérsele dado, en épocas futuras, la dimensión merecida. VB, a diferencia de Turbay y Belisario Betancur (BB), llegó al poder con mayoría convincente y adelantó el primer proceso de paz exitoso, en Colombia, o sea, con el M-19; Pizarro agrega que lo fue, también, en América Latina, y constituye el antecedente para éxitos futuros de sus sucesores con el Ejército Popular de Liberación (Epl), el Partido Revolucionario de los Trabajadores (Prt) y el Movimiento Armado Quintín Lame (Maql). El procedimiento utilizado fue la negociación con el adversario, es decir, comenzaba la etapa de maduración de los actores del conflicto interno armado, en Colombia, en busca de la paz.

El nombre de VB se asocia, en política doméstica, con el esquema gobierno versus oposición, o sea, en contraste con el estilo del Frente Nacional y acorde con prácticas de las democracias avanzadas de Occidente.

Se mantuvo la relación con el Movimiento de los Países No Alineados (MPNA), se condena la invasión de USA a Panamá en 1989, aunque desagrada la dictadura de Manuel Antonio Noriega, y se siguen criterios de la política exterior de BB en los ángulos de diversificación en los aspectos económico y comercial, sin posturas ideológicas, al tiempo que se buscó disminuir tensiones con USA.