Lograr que sus hijos consuman una mayor variedad y cantidad de frutas y verduras les puede proporcionar diferentes beneficios como disminuir el riesgo de padecer enfermedades crónico degenerativas y mantener un peso saludable.

Una alternativa sencilla y deliciosa para consumir las cinco porciones de vegetales recomendadas por la Organización Mundial de la Salud, OMS, es a través de las ensaladas. Así lo asegura la experta en nutrición y ciencia de los alimentos, Carmen Haro, quien forma parte del equipo de nutricionistas de la compañía Vida Produce Company (VPC).

Justamente, ‘Ensaladas con Actitud’ es la nueva propuesta de la multinacional Vida Produce Company que, bajo su marca Fresh Garden, lanza al mercado colombiano una propuesta de ensaladas listas para consumir, desarrolladas por la chef bogotana Denise Monroy.

Su investigación sobre los mejores ingredientes de la gastronomía nacional y su personalidad son el sello de cada una de las versiones que ya están al alcance de los consumidores, en las grandes superficies de Bogotá y Medellín, y próximamente de Cali y Barranquilla.

“Con la misión de aumentar el consumo de vegetales frescos, y de facilitar la labor de armar un menú delicioso en poco tiempo, los colombianos disfrutarán de la creación de una chef en su mesa, con una ensalada que mezcla lo mejor del campo colombiano, con frutos secos y vinagretas que resaltan todo el sabor de los alimentos”, indica Haro.   

Para la nutricionista, si bien lograr que los jóvenes y adolescentes incorporen más vegetales en su alimentación diaria no es una tarea imposible, tampoco es fácil, por lo que brinda las siguientes recomendaciones:  

 Conviértase en un ejemplo a seguir 

• Aumente su consumo de frutas y vegetales, incluya al menos una porción en cada una de las comidas principales del día.
• Permita que sus hijos vean que usted realiza elecciones saludables a la hora de comer. Por ejemplo, que prefiere una ensalada como guarnición, en lugar de papas fritas, o bien que comienza todas sus comidas con una ensalada.
• Si le da hambre a media mañana o media tarde consuma una verdura o una fruta.

No los obligue

• Tenga paciencia. Si todos los días incluye verduras en sus comidas, verá que sus hijos poco a poco se acostumbrarán a su sabor y consistencia y las aceptarán.
• No los castigue o los premie por comerlas, eso podría distorsionar su percepción y afectar su consumo de frutas y verduras en la edad adulta.
• No convierta la hora de la comida en un campo de batalla. Deles tiempo para probarlas y aceptarlas.

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Variedad

Variedad es la palabra clave de una alimentación saludable y, si intenta agregar color y variedad en la alimentación de sus hijos, las frutas y los vegetales serán un gran aliado. Puede cambiar su presentación para hacerlas atractivas a la vista, o bien su textura para ajustarla al gusto de sus hijos.

Adquiera frutas y verduras de temporada

• Hacerlo le puede ayudar a conseguirlas a un menor costo y también a consumirlas en su punto óptimo de sabor y nutrición.
• Permita que sus hijos le acompañen al mercado y que sean ellos los que elijan la verdura o fruta que desean comer, o intentar una que no hayan probado.

Siempre al alcance

• Coloque las frutas y las verduras al alcance de sus hijos, de forma tal que cuando entren a la cocina o abran la nevera siempre las vean.
• Puede tener siempre ensaladas listas para consumir para incluirlas como guarnición el mayor número de ocasiones en la semana.
• Puede picar la fruta y la verdura y tenerla lista para su consumo dentro del refrigerador, así cuando lo abran será su primera opción para consumir.

Agréguelas a todos sus platos

• Puede agregar fruta picada al cereal para el desayuno
• Añadir su fruta favorita al yogurt
• Preparar un licuado o un smoothie con fruta natural
• Incorporar vegetales a sus jugos
• Siempre agregar verduras a las pastas
• Preparar sopas de verduras molidas o en trozos
• Incluir verduras en las pizzas y sándwiches
• Colocar un poco de ensalada como guarnición de sus platillos favoritos
• No se olvide de agregar fruta a sus ensaladas

La buena alimentación siempre será una prioridad en las primeras etapas de crecimiento de los niños, ya que esto permite no solo mantener una salud óptima, sino también ayuda a evitar problemas de conducta, dificultades en la escuela e incertidumbre en su lugar de trabajo como adultos.

La infancia es una etapa clave para el crecimiento del cerebro y sin los alimentos adecuados para este órgano, el niño podría presentar algún retraso en su desarrollo, provocando así un retraso en el crecimiento y la experimentación de dificultades de aprendizaje que persistirán en su adolescencia.

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Así mismo, los alimentos también pueden ser importantes para la salud mental. Nutrientes como el ácido fólico, la vitamina B6 y la colina son necesarios para sintetizar ciertos químicos cerebrales, llamados neurotransmisores, que regulan el estado de ánimo y la memoria. Un desequilibrio de estos, a menudo, se asocia con afecciones relacionadas con el estado de ánimo como ansiedad y depresión.

Por otro lado, si las verduras y las frutas no hacen parte de la alimentación de sus hijos podría alterar la forma en que el cuerpo quema grasas, carbohidratos y calorías, lo que puede conducir a sobrepeso u obesidad.

Y mantenerse con sobrepeso puede aumentar las probabilidades de que, en un futuro, un niño desarrolle enfermedades crónicas como diabetes tipo dos y enfermedades cardiacas; además tiene un costo emocional, ya que los niños con sobrepeso tienen más probabilidades de experimentar bullying y depresión.

Todo tiene un efecto en cadena, por eso es importante intentar que los niños y adolescentes se alimenten mejor y diversificar sus menús para llamar la atención de sus hijos.