Las acreencias por servicios prestados aumentaron más de $2 billones en el primer semestre de este año, según un informe elaborado por la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC), las cuales ahora se sitúan en $12,7 billones.

A propósito de esta cartera, Juan Carlos Giraldo, director general de la ACHC, indicó que el Acuerdo de Punto Final que activó el Gobierno para sanear las deudas con los  prestadores de servicios de salud avanza bien en el régimen subsidiado, pero no en el contributivo.

EL NUEVO SIGLO: ¿A qué atribuyen ustedes que deudas con hospitales y clínicas crecieran más de $2 billones en el último semestre?

JUAN CARLOS GIRALDO VALENCIA: Durante el año 2020, que es el último punto de referencia antes de este estudio, hubo una pequeña disminución en la cifra de deuda  porque gran parte de la operación de todo el sistema hospitalario se tuvo que concentrar en atender solamente covid. Entonces de todas las otras cosas no covid se tuvieron que posponer muchas de las intervenciones, y eso hizo que el volumen de atención decreciera  un poco, de lo no covid, y por supuesto el volumen también de facturación y de presentación de esas cuentas.

Pero ahora cuando llegamos a este corte, que es junio de este año, entonces vemos que todavía tenemos presencia de covid, pero se han reactivado muchas de las atenciones no covid. Entonces vuelve a subir el volumen de atención, pero infortunadamente no va  con la misma velocidad el pago de esas cuentas.

Entonces el efecto es que se empieza a represar y se observa que vuelve a haber cartera con un porcentaje de morosidad importante.

ENS: Según el informe, el 21% de lo adeudado a hospitales y clínicas corresponde a EPS del régimen subsidiado y los entes territoriales deben más de $800 mil millones ¿Qué pasó con el Acuerdo de Punto Final que promovió el Gobierno para sanear la cartera?

JCGV: El Punto Final tiene dos vertientes, una es del régimen contributivo donde el actor principal es la EPS y otra es del régimen subsidiado donde el actor es especialmente la entidad territorial y la EPS. Qué ha pasado: lo que estamos viendo ahora, y la Contraloría también, es que en el Acuerdo de Punto Final el régimen subsidiado va comportándose mejor con cerca de 63% de ejecución de la platica que había. Lo que se tenía estimado eran $1,5 billones, y ya va en un desembolso casi llegando al billón de pesos.

En cambio en contributivo que se tenía la gran expectativa de más de $5 billones, los desembolsos son exiguos, están alrededor de un 13% de lo que se había pensado se podía conseguir.

Entonces el Punto Final no está avanzando como se esperaba, no se está dando todo el saneamiento de deuda hacia los prestadores, y se ha concentrado mucho en el régimen contributivo, en los aseguradores y en los que venden medicamentos, y en los gestores farmacéuticos, y muy poco en los prestadores de servicios.

ENS: ¿Entonces qué puede pasar?

JCGV: Hay dos conclusiones grandes: en régimen subsidiado el Gobierno ha dado unos nuevos plazos y ha conseguido unos nuevos presupuestos, y eso hace pensar que en el año 2022 se va a llegar a cumplir prácticamente la mayoría de lo que estaba presupuestado en subsidiado. En contributivo tenemos una gran preocupación, y por eso le estamos diciendo al Gobierno que tiene que hacer que se vuelva eficaz el Punto Final, que se pueda hacer obligatoria la presentación de cuentas por parte de las EPS y que se puedan dar desembolsos hacia el sector prestador.

Si eso no es así, el Gobierno va a tener que acudir a otros mecanismos: al giro directo universal, a la liberación de las reservas técnicas, a más créditos con Findeter, a compras de cartera para tratar de suplir el faltante que va a quedar en Punto Final.