Aunque el viernes de la semana pasada la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de Bogotá registró de nuevo un incremento en la concentración de material particulado (PM), debido a la depresión tropical que se presenta en el Caribe y a los flujos de vientos que están transportando biomasa de incendios provenientes de Brasil, Perú, la Amazonía y la Orinoquía colombiana, durante el fin de semana las condiciones comenzaron a mejorar.

“Afortunadamente la calidad del aire mejoró de manera continua durante el fin de semana. Por ahora no se declara alerta alguna en la ciudad. Tenemos condiciones favorables en ocho estaciones y 11 en estado moderado”, indicó ayer en horas de la tarde la Secretaría de Ambiente.

Más específicamente, las estaciones de la carrera Séptima, Fontibón, Kennedy, Carvajal-Sevillana y Tunal, que se mantuvieron en estados regulares desde el viernes 23 de septiembre, lograron estabilizarse desde el sábado en la tarde. Ninguna de ellas comienza esta semana en rojo.

Así mismo, se prevé que el desplazamiento de la depresión tropical denominada Ian, hacia el noroccidente, reducirá su influencia sobre el territorio capitalino, por lo que paulatinamente los regímenes de vientos seguirán cambiando y se continuarán evidenciando estaciones más estables. Así mismo, serán favorables los vientos del oriente que promueven la dispersión de contaminantes.

Por ahora no se ve una afectación importante para el día lunes; sin embargo, se debe seguir la vigilancia de los incendios para tratar de prever la llegada de otra ola de contaminación. Así mismo, hay que tener en cuenta que la Secretaría de Ambiente realiza un constante monitoreo, evalúa y analiza minuto a minuto los factores internos y externos que puedan influir en el estado de la calidad del aire.

No obstante, se seguirán presentando vientos a nivel regional provenientes del suroriente, pero con menor intensidad, por lo que podrían llegar masas de contaminantes a raíz de los incendios que se han registrado en el sur. A este respecto vale referir que los incendios en la región están generando alrededor de 150 mil toneladas al día de biomasa, mientras Bogotá produce normalmente cerca de 20 toneladas al día de material particulado.

Vale recordar que el viernes la elevación de la carga de material particulado en la atmósfera de la ciudad hizo que las estaciones de Kennedy, Tunal, Fontibón y Carrera Séptima presentaran condiciones regulares (amarilla), y la estación de Carvajal-Sevillana llegara a tener el índice en rojo (mala).

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Recomendaciones para la ciudadanía

Debido a este fenómeno, la Administración Distrital realizó una serie de recomendaciones para evitar afectaciones en la salud por contaminación del aire tales como evitar la actividad física al aire libre. Así mismo, la cartera de Ambiente recomendó tomar medidas de protección que eviten o disminuyan la exposición de la población mientras hace sus desplazamientos en transporte público, en bicicleta o caminando.

En tercer lugar, precisó que los biciusuarios deberán utilizar protección respiratoria especialmente entre las 6:00 y 10:00 de la mañana y entre las 5:00 de la tarde y las 8 de la noche; la ciudadanía deberá usar protector solar para la piel, contar con protección ocular, consumir abundante agua y evitar bebidas azucaradas y gasificadas.

“Por el momento hacemos dos recomendaciones específicas a la ciudadanía: la primera, reducir o evitar la actividad física intensa y prolongada al aire libre; de ser necesaria esa actividad física, recomendamos utilizar protección respiratoria. Como siempre, mantenernos muy hidratados y las personas que sufren de alguna comorbilidad respiratoria, que consulten con su médico las medidas específicas que deben tener”, indicó la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.

Añadió, además, que otro de los factores que contribuyó a que se presentara un aumento del material particulado fue que, si bien es cierto que en la jornada del Día sin Carro y sin Moto se dejaron de emitir alrededor de ocho toneladas de material particulado en la ciudad, lo que le dio un respiro al aire el pasado jueves, un día después volvieron a salir los vehículos a las vías y se volvió a sentir el impacto de esas emisiones sobre la ciudad.