Cómo detener el covid y alistarse para otra pandemia | El Nuevo Siglo
SEGÚN EL comité independiente de expertos dijo que una serie de factores crearon un coctel tóxico que permitieron que la pandemia se convirtiera en una crisis humana catastrófica
Foto archivo AFP
Miércoles, 12 de Mayo de 2021
Redacción internacional con AFP

FUERTE crítica a la gestión global frente al covid-19, lo que se debe hacer ya para detenerlo y los pasos a seguir ante futuras pandemias contempla el informe que expertos encargados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo público este miércoles.

La misión conformada por 13 expertos señala que la actual pandemia que ha matado a más de 3,3 millones de personas, y destruido la economía mundial, "pudo haberse evitado", la califican como el ‘Chernóbil del siglo XXI" y piden urgentemente amplias reformas de los sistemas de alerta y prevención.

El panel independiente que realizó su informe por encargo de la OMS hace su primer fuerte crítica precisamente a esa Organización por considerar que, por varios factores, tardó demasiado en dar la alarma, lo que llevó a que los países no visualizarán la magnitud de lo que se avecinaba y, por ende, una acción eficaz para mitigar su impacto.

"Es evidente que la combinación de malas decisiones estratégicas, de una falta de voluntad para abordar las desigualdades y de un sistema mal coordinado, creó un coctel tóxico que ha permitido a la pandemia convertirse en una crisis humana catastrófica", señala el informe.

Según los expertos, transcurrió "demasiado tiempo", entre la notificación de un foco epidémico en China en la segunda quincena de diciembre de 2019 y la declaración, el 30 de enero por la OMS, de una emergencia de salud pública de alcance internacional, el más alto nivel de alarma.

El grupo de especialistas recomienda el establecimiento de un nuevo sistema mundial de vigilancia basado en una "transparencia total". 

"Proponemos que la OMS pueda publicar en tiempo real todas las informaciones de las que disponga sin permiso de los gobiernos. También es necesario que los 194 países miembros de la ONU" le permitan "llevar a cabo una investigación" donde hay un foco infeccioso, explicó Michel Kazatchkine, miembro del panel independiente.

"La situación en la que nos encontramos hoy podría haberse evitado", dijo una de las copresidentas de este panel, Ellen Johnson Sirleaf, expresidenta de Liberia.



Retrasos en todas partes

Establecido por el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, el grupo independiente, pasó los últimos ocho meses examinando la propagación de la pandemia y las medidas tomadas por el organismo sanitaria y los países para enfrentarla.

Porque desde el inicio, la OMS fue criticada por sus respuestas a la crisis, principalmente por la tardanza en recomendar el uso de mascarilla. Sobre todo, fue acusada por Estados Unidos de haber sido extremadamente complaciente con China, donde apareció el coronavirus, y tardado en declarar el estado de emergencia sanitaria mundial. El gobierno chino, por su parte, fue señalado de haber intentado camuflar la epidemia.

Por supuesto, "podemos decir que ha habido retrasos en China, pero ha habido retrasos en todas partes", comentó la exprimera ministra de Nueva Zelanda, Helen Clark, quien copreside el grupo de expertos.

"Ha transcurrido demasiado tiempo", constataron los expertos, entre la notificación de un foco epidémico de neumonía de origen desconocido en la segunda quincena de diciembre de 2019 y la declaración, el 30 de enero por la OMS, de una emergencia de salud pública de alcance internacional, el más alto nivel de alarma.

Según los expertos, esta declaración podría haberse hecho desde la primera reunión del Comité de Emergencia de la OMS el 22 de enero. 

Pero aunque la OMS hubiera declarado la emergencia sanitaria una semana antes, las cosas no habrían cambiado mucho ante la "inacción de tantos países", reconoció Clark.

Porque fue hasta el 11 de marzo, cuando el doctor Tedros calificó la situación de pandemia, que los gobiernos comprendieron realmente el peligro.



Un "mes perdido"  

A este respecto, febrero de 2020 fue un "mes perdido" durante el cual muchos países podrían haber tomado medidas para detener la propagación del virus.

En definitiva, "retrasos, vacilaciones y negaciones" han permitido a la epidemia y luego a la pandemia eclosionar, concluye el informe.

El grupo de expertos recomienda a los gobiernos y a la comunidad internacional adoptar sin demora un conjunto de reformas encaminadas a transformar el sistema mundial de preparación, alerta y respuesta a las pandemias.

Para ello, el informe propone varias vías, entre ellas la creación de un Consejo Mundial de Lucha contra las Amenazas Sanitarias, así como el establecimiento de un nuevo sistema mundial de vigilancia basado en una "transparencia total". 

Este sistema daría a la OMS el poder de publicar de inmediato información sobre epidemias susceptibles de convertirse en pandemias sin solicitar la aprobación de los países.

El informe formula también una serie de recomendaciones de aplicación inmediata para poner fin a la propagación del covid, llamando particularmente a los países ricos a proporcionar más de 2.000 millones de dosis de vacunas de aquí a mediados de 2022, al menos 1.000 millones de ellas antes de septiembre.

Actuar ya

El informe deja claro que el mundo ha fracasado en controlar rápidamente la epidemia de covid-19, pero destaca que aún hay tiempo de detener el virus y paralelamente prepararse para hacer frente a un nuevo agente patógeno que amenazará a la humanidad en un futuro cercano.

De esta forma el grupo de expertos independientes recomienda:

Cómo detener el virus. Los países de ingresos altos que cuentan con una vía de desarrollo de vacunas para una cobertura significativa deberían, paralelamente a la intensificación de su producción, comprometerse a suministrar más de 2.000 millones de dosis de vacunas de aquí a mediados de 2022, de las cuales al menos 1.000 millones antes de este septiembre, a los 92 países de ingresos bajos y medios que se benefician del sistema de distribución Covax.

Ultimátum sobre la propiedad intelectual.  Los principales países productores de vacunas y los fabricantes deberían reunirse, bajo los auspicios de la OMS y la Organización Mundial del Comercio (OMC), para acordar la concesión de licencias voluntarias y la transferencia de tecnologías a fin de aumentar la producción y reducir la escasez. Si no se adoptan medidas en el plazo de tres meses, la renuncia a los derechos de propiedad intelectual "debería entrar en vigor inmediatamente".

Fondos del G7. Debería comprometerse inmediatamente a aportar el 60% de los USD19.000 millones necesarios en 2021 al dispositivo internacional encargado de acelerar el acceso a las herramientas de lucha contra el covid (Acelerador ACT). Y debería adoptarse una fórmula de reparto de la carga para garantizar una financiación continua de estos bienes públicos mundiales (vacunas, productos de diagnóstico, tratamientos...).

Aplicar los ingresos que funcionan. Cada país debería aplicar las medidas de salud pública que hayan dado buenos resultados en la escala necesaria para detener la pandemia. "Para hacerlo, el liderazgo de los jefes de Estado y de Gobierno es primordial", según los expertos.

Un órgano mundial de lucha. Los expertos proponen crear un Consejo Mundial de Lucha contra las Amenazas Sanitarias que estaría "encargado de mantener el compromiso político con la preparación y la respuesta ante las pandemias y la responsabilidad de los diferentes actores, en particular mediante un seguimiento y un control mutuo". Los países deberían también adoptar una Convención marco sobre la pandemia en los próximos seis meses.



Una OMS libre y transparente. Piden el establecimiento de un nuevo sistema mundial de vigilancia basado en una "transparencia total". Ese sistema daría a la OMS el poder de publicar de inmediato información sobre las epidemias susceptibles de convertirse en pandemia, sin solicitar aprobación, y podría enviar expertos para que realizaran investigaciones sin demora.

Reforzar la autoridad de la OMS. También piden que se refuerce el financiamiento de la OMS, principalmente elaborando un nuevo modelo para poner fin a los fondos específicos y aumentar las cuotas de los Estados miembros (dos tercios). La autoridad y la independencia del director general de la organización también deben reforzarse, en particular mediante un mandato único de siete años sin posibilidad de reelección (frente a un mandato actual de cinco años prorrogable). La misma norma debería aplicarse a los directores regionales.

Mecanismo mundial de financiamiento.  Crear un mecanismo internacional de financiamiento para casos de pandemia, que tendría la capacidad de movilizar contribuciones a largo plazo (10 a 15 años) de entre 5.000 y 10.000 millones de dólares anuales para financiar la preparación permanente. También estaría listo para gastar rápidamente entre 50.000 y 100.000 millones de dólares anticipando los compromisos futuros en caso de declaración de pandemia.