Un fuerte y prolongado sismo de 6,4 grados de magnitud registrado en el sur de México sacudió al mediodía de este jueves la superpoblada capital mexicana, informaron autoridades, que no han reportado víctimas o daños por el momento.
"Sin reporte de daños al momento! En el monitoreo a los estados no se reportan al momento afectaciones", escribió en su cuenta de Twitter el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente.
En la Ciudad de México se registraron evacuaciones masivas de edificios. El alcalde capitalino, Miguel Ángel Mancera, dijo a la televisora Foro TV que no se han reportado víctimas por el sismo y que todos los servicios de la ciudad están funcionando.
Sin embargo, se han registrado cortes del suministro eléctrico y de las comunicaciones en al menos algunas zonas céntricas como el barrio Roma, constató la AFP.
Pese a que los capitalinos están habituados a regulares movimientos de tierra, el sismo de este jueves los sorprendió por su fuerza y duración.
El Servicio geológico de Estados Unidos (USGS, por su siglas en inglés) reportó en un primer momento que la magnitud del sismo fue de 6,8 grados pero posteriormente la redujo a 6,4, mientras que el mexicano Servicio Sismológico Nacional (SSN) lo sitúa en 6,6.
De acuerdo con el USGS, el temblor ocurrió a las 12H00 locales (17H00 GMT) a 15 km al oeste del municipio de Tecpan (sur) con una profundidad de 23 km.
Tecpan (62.000 habitantes), situado en la región de Guerrero sobre la costa del Pacífico, fue también el municipio más cercano al anterior sismo de 7,2 grados del 19 de abril.
En la ciudad de Chilpancingo, capital de Guerrero, el sismo generó algunas escenas de pánico pero no se han reportado daños, dijo el alcalde Mario Moreno a la televisora Milenio.
El territorio mexicano se encuentra dividido entre cinco placas tectónicas y sus movimientos generan uno de los mayores índices de actividad sísmica en el mundo.
Muchos de esos temblores alcanzan a sentirse en la Ciudad de México por su singular tipo de suelo, ya que una parte de la urbe se asienta sobre un subsuelo fangoso derivado de los lagos que fueron drenados en el Valle de México.
El 19 de septiembre de 1985 un terremoto de magnitud 8,1 destruyó parte de Ciudad de México con un saldo de 3.700 muertos, según las actas de defunción del registro civil, aunque organizaciones civiles contabilizaron más de 20.000 fallecidos