SONAJERO. El pulso por la presidencia de la Federación Nacional de Departamentos va tomando cada día más intensidad. Se afirma en los corrillos políticos que el Gobierno se movería para que el escogido sea el mandatario de Nariño, Luis Alfonso Escobar, que fue avalado por el Pacto Histórico y se le considera cercano a la vicepresidenta Francia Márquez. Entre tanto, en la otra orilla se indica que los nombres que suenan con más fuerza son los de los gobernadores del Valle, Dilian Francisca Toro (La U) y de Antioquia, Andrés Julián Rendón (Centro Democrático). Habría una tercera corriente que considera que el presidente de la federación no debe ser petrista ni antipetrista declarado.
BAJO LA LUPA. La designación de Aldo Cadena en la presidencia de la Nueva EPS se podría complicar. Según trascendió en altas fuentes judiciales, se presentará un recurso contra la decisión de la junta directiva de la empresa aseguradora en salud que, a mediados de este mes, cambió los requisitos y el manual de funciones para el cargo. La acción sería presentada esta semana y buscaría reversar la decisión, al tiempo que se pediría investigar a los cinco integrantes de la junta que votaron a favor de las modificaciones en una EPS que tiene alrededor de 10 millones de afiliados, uno de cada cinco en Colombia.
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UN AÑO Y NADA. La próxima semana se cumplirá un año de la citación a sesiones extras del Congreso por parte de gobierno Petro. La coalición oficialista era entonces mayoritaria tanto en Senado como en la Cámara de Representantes, a tal punto que la Casa de Nariño pensaba que si presentaban las reformas de salud, pensiones y laboral desde el primer día de la agenda parlamentaria había posibilidades de que una o dos de las iniciativas pudieran ser aprobadas antes de que terminara la primera legislatura en junio de 2023. Al final de cuentas, la coalición se rompió un mes después y las reformas siguen en vilo.
CON PIES DE PLOMO. Se le preguntó a un parlamentario sobre por qué no se estaba hablando de una reforma política, pero sí de los proyectos ya en curso de salud, pensiones y laboral, y el que ya está en confección sobre justicia. “… Se necesita una reforma política, pero hay mucha prevención en torno a que el petrismo aproveche el escenario para tratar de meter algún mico para viabilizar la reelección presidencial o aumentar el poder presidencial, rompiendo así el equilibrio de poderes”, precisó.
DUDA ROJA. En el partido Liberal se está a la espera de que se fijen las directrices para la convocatoria de la convención partidista. Lo que no está claro es si el cronograma la fijará para el primer o el segundo semestre. Por lo pronto, todo depende de lo que determine el jefe único de la colectividad, César Gaviria.