Aunque todos los ojos en el Congreso están puestos en los proyectos de ley y reforma constitucional que se deriven de un eventual acuerdo de paz así como en la iniciativa de reforma tributaria estructural, para varios senadores y Representantes la verdadera ‘papa caliente’ de este primer tramo de la legislatura será el trámite del proyecto que pide convocar un referendo para que los colombianos decidan sobre si es viable o no que las parejas compuestas por personas del mismo género puedan adoptar en Colombia, tal como lo estableció un fallo de la Corte Constitucional. El proyecto fue radicado el jueves pasado y es claro que encenderá muchos debates en las próximas semanas, generando más de una división en los partidos así como presiones de múltiples sectores nacionales a favor o en contra.
2,3 millones de firmas
No se trata de un proyecto cualquiera, ya que la iniciativa, radicada por la senadora liberal Viviane Morales, viene respaldada por más de 2 millones 300 mil firmas, que fueron recogidas en el último año y medio. Según la congresista, la adopción es un mecanismo de protección al niño en su derecho a tener una familia, tal como lo contempla el artículo 42 de la Constitución, que expresa que la familia se conforma entre un hombre y una mujer unidos en matrimonio o en unión marital de hecho.
Del plebiscito al referendo
“… A mí el proyecto como tal no me gusta, pero soy un demócrata y creo que así como todos decimos ahora que será la ciudadanía la que tendrá la última palabra sobre el proceso de paz con las Farc, a través de la votación del plebiscito, no veo por qué tengamos que oponernos a que sean los mismos colombianos los que decidan sobre quién y cómo se puede adoptar niños en el país… Ya en otros países este tema, como el del aborto y el matrimonio homosexual se llevaron a las urnas, y la gente decidió… Le repito, no me gusta el proyecto y lo votaré en contra, pero no puedo desconocer que hay más de dos millones de firmas que piden que el tema se someta a votación, y ello no se puede desconocer”, precisó un senador que pidió la reserva de su nombre “… hasta que mi bancada y las directivas analicen el tema y se decida si se respalda o no, o se dejará el tema a la conciencia de cada parlamentario”.
Trámite prioritario y de urgencia
Por tratarse de un proyecto respaldado por el constituyente primario es claro que su trámite es preferencial y debe darse como si tuviera mensaje de urgencia. Lo que implica, entonces, que tendrá que debatirse como primer proyecto en esta nueva legislatura. Según Morales, en lo que queda de julio y agosto debería quedar aprobado. Si ello pasara, tendría que pasar a control de exequibilidad en la Corte Constitucional. Si allí, sin duda una instancia más complicada que el propio Parlamento, le dan vía libre, entonces se procederá a la respectiva convocatoria a las urnas para votar la modificación al artículo 44 de la constitución sobre los derechos fundamentales de los niños. La pregunta es ¿Se cruzará con la fecha para el plebiscito de paz?