Por falta de quórum decisorio se levantó anoche la sesión de la plenaria del Senado y se convocó para el lunes a las 4 de la tarde para un debate de control político.
Este escenario configura el hundimiento del proyecto que creaba 16 circunscripciones especiales para elegir igual número de representantes a la Cámara como voceros de las víctimas en el Congreso, porque ya no tendría tiempo suficiente para lograr su aprobación.
Anoche la disolución del quórum llegó sin que se lograra un acuerdo político para salvar la iniciativa.
Por el contrario, las posiciones a favor y en contra del acuerdo de paz con las Farc fueron cada vez más firmes.
La senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, le recordó a la plenaria que su partido es mayoría e hizo parte del grupo ganador del plebiscito, precisando que “estamos firmes en las posiciones que representamos. Invitamos a este Congreso a reconocer que este partido representa la mayoría democrática. La mayoría democrática le dijo no a los acuerdos e insiste en necesarias modificaciones por el bien de Colombia, por el porvenir de Colombia y por la verdadera paz de Colombia”.
En el otro bando, el senador Gustavo Petro, de Colombia Humana, invitó a “que se haga un último intento de un acuerdo político. Nuestra propuesta no es mala. Son 16 curules en Cámara. Acepten esa posibilidad. Que en aquellos territorios donde hubo violencia perpetua, puedan sentarse aquí con sus víctimas y hacer las leyes”.
Petro sostuvo que estaba dispuesto a aceptar las ocho curules de circunscripción nacional propuestas por el uribisno: “Yo creo en la legitimidad de los argumentos que ustedes han utilizado para defenderlas y también se puedan sentar aquí”.
En su intervención, la senadora Victoria Sandino, del partido Farc, le dio la razón al expresidente Álvaro Uribe “porque efectivamente no son suficientes las circunscripciones especiales de paz. Es necesario que se implemente por ejemplo los planes de desarrollo con enfoque territorial”.
Sin embargo, al no lograrse acuerdo el senador Julián Gallo (Carlos Lozada), también de Farc, consideró que el hundimiento “demuestra quienes son los interesados en incumplir los compromisos con las víctimas en Colombia”.
Desde el Polo Democrático, el senador Alexander López, adjudicó el hundimiento al afán del presidente Iván Duque de “mirar cómo hacer trizas los acuerdos y cómo inician el desmonte del acuerdo que mal que bien es un acuerdo que terminó con la guerra”.