Máxima alerta por seguridad urbana en el país | El Nuevo Siglo
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Sábado, 14 de Agosto de 2021
Redacción Nacional

Los indicadores de seguridad en general en el país han mejorado en los últimos años, sin embargo a nivel urbano no dejan de presentarse picos en delitos como el homicidio, el hurto en sus diferentes modalidades y la extorsión, que por momentos ponen en jaque la labor que adelanta la Policía. 

El crimen hace unos días de un patrullero en Bogotá prendió de nuevo las alarmas sobre esta situación. En tanto que el Gobierno nacional anuncia nuevas medidas, mientras que la reestructuración que se hace a la Policía busca también su fortalecimiento para luchar de mejor manera contra el crimen.

Los homicidios en el primer semestre del presente año en todo el país fueron 6.864, en tanto que en similar periodo el año anterior se registraron 5.545, según cifras del Ministerio de Defensa Nacional.

De igual forma crecieron los secuestros, entre enero y mayo del presente año se registraron 27, mientras que en igual período del 2020 fueron 24.

Vale señalar que las cifras de este indicador en el citado periodo se salen del contexto de lo que ha sucedido en los últimos años, pues la reducción de los secuestros es uno de los mayores logros de la política de seguridad del presidente Duque. Para la muestra en el primer semestre de 2019 se registraron 43 casos a nivel nacional.

El hurto de vehículos también creció en el primer semestre de este año cuando se reportaron 18.786 casos, mientras que en igual lapso del año anterior fueron 16.179.

Asimismo en el primer semestre del presente año creció el hurto a personas pues se reportaron 117.968 casos; en tanto que en similar período del 2020 fueron 98.981.

Si se tiene en cuenta que más de un 70% de la población colombiana vive en los centros urbanos, ello implicaría que la mayor parte del incremento que se ha presentado este año en los delitos señalados recae en las grandes capitales como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, entre otras.



A principios del presente año el presidente Duque dijo al hacer un balance de seguridad que “cerramos el año 2020 con una tendencia de reducción del hurto, el hurto a residencia, el hurto a establecimientos de comercio, el hurto de automotores, también el hurto de celulares y nos hemos trazado metas muy puntuales en cada una de las regiones y las áreas metropolitanas, para que esos delitos se mantengan a la baja".

Hechos puntuales

Las administraciones de las diferentes ciudades capitales así como la Policía en muchas ocasiones han señalado que la percepción que tienen los ciudadanos frente a la inseguridad, por lo general, está muy por encima de las cifras que realmente se producen y que, como consecuencia de esto, existe el pensamiento de que la delincuencia le está ganando a las autoridades.

En cierta forma tienen razón las administraciones porque como en el caso de Bogotá y Medellín varios delitos se han reducido. Sin embargo hechos como el asesinato en días pasados del patrullero Humberto Sabogal Soto, en los que resultó herido su compañero al sur de la capital de la República cuando requirieron requisar a dos sujetos y estos sin darles tiempo de cubrirse les dispararon, terminan por incrementar la percepción que hay de inseguridad en los ciudadanos, a pesar de los avances y el trabajo sin tregua de la Policía Nacional contra el delito en todas sus formas.

Luego se supo que los dos sujetos que les dispararon a los policías, acababan de robarle la bicicleta a un ciudadano. Uno de los presuntos asesinos del patrullero Sabogal, de nacionalidad venezolana, fue capturado minutos después cerca al lugar de los hechos, quien portaba un arma de fuego que dejó caer segundos antes de que los uniformados lo aprehendieran.

El otro individuo es buscado intensamente en Bogotá y regiones aledañas hasta donde podría haberse desplazado en su huida. Las autoridades ofrecen $50 millones por información que lleve a su captura. 

Como se dijo, hechos de la resonancia del crimen del patrullero encienden el debate nacional sobre la seguridad, en este caso urbana, y las medidas que se requieren para enfrentar de mejor manera el fenómeno de la criminalidad.

Tras el asesinato del patrullero Sabogal, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, recordó que la Administración Distrital se había trazado la meta de aumentar el pie de fuerza para diciembre de este año en 1.500 policías.

“Pero esta situación no da espera. Necesitamos que esos refuerzos permanentes sean ya. A Bogotá le suelen mandar refuerzos cuando hay actividades como el 20 de julio o el 7 de agosto, y cuando se tienen fechas en donde se sabe que va a haber marchas, de un día a otro nos mandan 2.000 policías de refuerzo. Pero la situación crítica de seguridad que tenemos en este momento no nos permite tener refuerzos temporales”, indicó López.

Frente a esta situación el Gobierno anunció por intermedio del ministro de Defensa Nacional, Diego Molano, medidas inmediatas a través de lo que denominaron el Plan de Intervención y Acompañamiento de Bogotá.

Se desplegarán actividades de prevención en las calles y cuatro comandos especiales serán liderados por generales para monitoreo de cada sector de la ciudad. 

De igual forma el titular de la cartera de Defensa anunció la asignación de 1.500 uniformados adicionales, que serán entregados en el marco de dicho Plan de Intervención.



"Mi compromiso es con Bogotá. Ante la grave situación y la solicitud de apoyo especial de la Alcaldesa la decisión del Ministerio de Defensa y del Gobierno nacional es la activación de la 'Fuerza Especial de Intervención' con 1.500 uniformados de nivel nacional, que intervendrán en cuatro comandos situacionales liderados por cinco generales de la República", resaltó el ministro Molano.

Estos nuevos uniformados estarán encargados de realizar actividades de prevención, contención y disrupción del delito en los más de 1.000 puntos de la ciudad priorizados y que son los más afectadas por principales delitos contra la seguridad ciudadana y la convivencia, tales como homicidios y hurtos, especialmente en comercios y en el sistema de transporte masivo de Transmilenio.

"Este es un gran esfuerzo del Gobierno nacional. Esperamos todo el apoyo e inversión de la Alcaldía Mayor para reforzar la atención a los bogotanos", señaló el ministro Molano.

Dentro de la estrategia focalizada a la reducción del delito en la capital del país, se dispondrá de tres líneas de acción, prevención, disuasión y control e investigación criminal, dirigidas al fortalecimiento del servicio de policía. 

Finalmente, el jefe de la cartera de Defensa destacó que "el apoyo a la Policía debe ser permanente, no solo cuando se registran éxitos, sino en los momentos más difíciles. La Policía es solo una. Al Gobierno local le pedimos: avancen en la reconstrucción de los más de 40 CAI que fueron vandalizados durante los hechos violentos registrados hace unos meses en Bogotá".

Por su parte el secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia de Bogotá, Aníbal Fernández de Soto, dio a conocer los últimos indicadores en materia de seguridad. Pese a que aclaró que hacer comparaciones con el año inmediatamente anterior es un ejercicio complejo, señaló que los homicidios en la ciudad con relación al mismo periodo del año pasado siguen aumentando.

Específicamente, entre enero y julio de 2019 se presentaron 562 homicidios; en esos mismos meses del 2020 fueron 571, y en dicho plazo de tiempo en este año fueron 656. Esto significa que en lo corrido de este año se ha incrementado en 85 este indicador de alto impacto.

En tanto que en Santa Marta se ha disparado el sicariato, pues en lo corrido de este mes han sido asesinadas cinco personas y dos más quedaron heridas en diferentes hechos que se han presentado.

Incluso desde marzo pasado, la alcaldesa Virna Johnson pidió el acompañamiento del Ejército para frenar la ola de inseguridad en la capital del Magdalena, que además del sicariato se manifiesta en el incremento de otros delitos como el hurto a personas y a residencias.

El director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, atendió el llamado de la alcaldesa Johnson, pues delegó al mayor general Julio César González Bedoya, comandante de la Regional 8, para trasladarse a Santa Marta con el fin de analizar la situación que se presenta y adoptar correctivos.

De igual forma se anunció a este Distrito que llegaron 16 uniformados que estarán en labores de análisis, 50 patrulleros, 32 agentes para microcuadrantes y polígonos de seguridad, 20 funcionarios que reforzarán la Sijín, y además, la Administración Distrital adquirió 20 nuevas motocicletas.

Mientras que en  el Valle de Aburrá, incluyendo a Medellín, en lo que va corrido de este año los homicidios se redujeron en un 5%, sin embargo el hurto a personas aumentó hasta un 20% y los hurtos de moto crecieron en un 11%.

Un hecho puntual que fue reprobado por la ciudadanía de Medellín se produjo en días pasados, cuando tres menores fueron asaltados en el barrio El Salvador para quitarles los celulares por un sujeto que se bajó de una moto, y  sin importar su corta edad los amenazó con una arma de fuego hasta lograr su cometido.

Transformación de la Policía

En junio pasado el presidente Iván Duque; el ministro de Defensa Nacional, Diego Molano Aponte; y el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas Valencia, dieron a conocer las bases del proceso de transformación integral de la Policía Nacional, que hace énfasis en la aplicación estricta de todos los principios y protocolos de derechos humanos, la certificación de los procesos, un cambio en la imagen institucional y la modernización de la entidad.

La estrategia de transformación integral está contenida en un proyecto de ley que fue radicado el pasado 20 de julio, y en un decreto gubernamental, incluye la creación del Viceministerio de Política de Defensa y Seguridad Ciudadana, al igual que una regulación muy estricta para limitar la comercialización, porte y uso de armas traumáticas.

Entre los 10 pilares que contempla la transformación de la Policía está que tenga más tecnología para la efectividad y transparencia policial, aumentando la capacidad de respuesta frente al delito, una mejor y mayor analítica de datos para la planeación y prestación del servicio y desplegando instrumentos de vigilancia aérea no tripulada.

También se está adoptando un nuevo modelo de vigilancia policial con cuadrantes de vecindario.

El presidente Duque explicó “queremos más tecnología, mejor tecnología para el servicio de policía”. Agregó que “esperamos acelerar la aplicación de los bodycam, las cámaras corporales, en los procedimientos de seguridad ciudadana, para que quede toda la trazabilidad y quede, además, altamente identificado el honor policial, en los más de 30 millones de procedimientos”.

Añadió que “he dado la instrucción, también, de fortalecer los servicios de cámaras, y también de drones, para que tengamos monitoreo, y tengamos también lectura en tiempo real de todos los procedimientos policiales, sobre todo los que tienen que ver con enfrentar motines, con enfrentar actos de vandalismo y, por supuesto, de disturbios”.

Sobre el nuevo modelo de vigilancia policial, el presidente Duque indicó que “con esa cercanía al ciudadano, también nos permita crear la figura del policía de vecindario. Y que con las redes de participación cívica, con los líderes comunitarios y con las juntas de acción comunal, se adelanten permanentemente actividades que acerquen ese amor de la institución por el ciudadano a la confianza del ciudadano con la institución”.

Uno de los factores que afecta la seguridad urbana es la alta reincidencia en el delito, es decir, personas que han estado en la cárcel y tras recuperar la libertad, delinquen nuevamente.

El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) con cifras a este mes reportó 22.509 reincidentes, la mayoría de los cuales habían sido cobijados con medida intramural.

Por regiones, las que mayor número de reincidentes tienen son Bogotá con 6.768, Valle con 3.109,  Antioquia con 2.992 y Santander con 1.483.