En una carta abierta dirigida a los colombianos y a la comunidad internacional, el Centro Democrático expresa su profunda preocupación por lo que califican como un alarmante plan contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, que implica graves amenazas a sus derechos fundamentales.
La denuncia surge en el contexto de la llegada a Colombia de Salvatore Mancuso, quien, según el partido político, está siendo utilizado como un instrumento político contra Uribe "demandamos a organismos internacionales medidas cautelares para su protección".
El comunicado emitido por el Centro Democrático señala que la llegada de Mancuso se da bajo el amparo de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), a pesar de su prontuario delictivo, que incluye condenas por crímenes atroces, más de 50 mil hechos criminales y numerosas órdenes de captura. Mancuso, quien fue extraditado a los Estados Unidos en 2008 por el gobierno de Uribe, ahora regresa a Colombia con la intención de cambiar sus testimonios anteriores y utilizarlos para incriminar al expresidente.
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"Mancuso sembró el terror en diferentes regiones del país con masacres como la de Mapiripán en el Meta con 75 víctimas, la de El Salado en Sucre que dejó 60 personas asesinadas, la de La Gabarra en Norte de Santander con 123 víctimas mortales, la de Pichilín en Sucre con 11 víctimas o la del Tomate en Córdoba con 15 campesinos y un niño de 2 años asesinados, entre muchas más"
Según el partido político, la JEP, un organismo creado tras los acuerdos de paz de La Habana y supuestamente diseñado para la reconciliación, está siendo utilizada para propósitos ajenos a su mandato original. El partido político acusa a la JEP de admitir las declaraciones de Mancuso con aparente candidez, a pesar de las múltiples contradicciones y mentiras presentes en estas.
"Hoy, un criminal de lesa humanidad como Mancuso regresa a Colombia, amparado por la JEP y el Gobierno Nacional, como un instrumento político contra Álvaro Uribe Vélez. Con contradicciones y mentiras que han sido enfrentadas y desmontadas con pruebas, entregadas ante la Comisión de Acusaciones, la Fiscalía y la opinión pública, por el Expresidente y su equipo de abogados".
Además, el comunicado resalta los logros alcanzados durante los gobiernos de Álvaro Uribe Vélez, enfatizando la significativa reducción de homicidios, secuestros y otros delitos durante su mandato. El partido afirma que la persecución contra Uribe es injusta y se basa en falacias promovidas por criminales como Mancuso.
Estos son algunos de los datos que la ciudadanía no olvida de los gobiernos de Álvaro Uribe:
- Los homicidios pasaron de 28.837 casos (2002) a 15.817 (2010).
- El asesinato de sindicalistas pasó de 196 a 15 casos entre 2002 y 2010.
- El asesinato de periodistas disminuyó de 15 casos en 2002 a 1 en 2010. Mientras en 2002 se registraron 115 masacres, en 2010 hubo 10 (se hubiera querido una cifra de cero)
- El secuestro se redujo de 2.882 casos en 2002 a 282 en 2010.
- El secuestro extorsivo pasó de 1708 casos en 2002 a 75 en 2010.
En este sentido, el Centro Democrático solicita medidas cautelares a organismos internacionales para proteger los derechos del expresidente Uribe y reitera su denuncia sobre la injusta persecución basada en las falacias de Mancuso. Asimismo, el partido confía en que el tribunal de la opinión pública reconocerá la verdad detrás de estos eventos.
El partido de oposición ratifica su posición ante instancias nacionales e internacionales, denunciando la persecución que consideran se ha tejido en torno a la figura de Álvaro Uribe Vélez. La carta finaliza afirmando que "convertir a uno de los peores criminales de lesa humanidad en un adalid de la verdad es inaceptable para el país, la comunidad internacional y, especialmente, para las víctimas de los crímenes perpetrados".