Tras el anuncio del ministro del Interior sobre el gran Acuerdo Nacional que propone al mínimo de la sociedad, distintos sectores políticos en el Congreso de la República se pronunciaron al respecto y se mostraron tanto en desacuerdo, como a favor de la propuesta.
Inicialmente, el senador del Centro Democrático Miguel Uribe explicó que “los nuevos liderazgos para Colombia deben tener la capacidad de unir en torno a una visión, pero también de convertir en realidad esas ideas. Estamos cansados de un presidente que no escucha, no reconoce críticas y solo viene a imponer. Nosotros hacemos parte de una nueva generación que vivió la guerra, pero que también fue capaz de unirse en torno a un objetivo común: la seguridad”.
Así mismo, el presidente de la Cámara, Raúl Salamanca, dijo que “creer en las regiones también debe hacer parte del Acuerdo Nacional. La articulación de alcaldes y gobernadores con el Gobierno Nacional será una apuesta que construirá confianza de la ciudadanía en sus instituciones y que generará oportunidades a la gente”.
Por su parte, la representante a la Cámara por el Huila, Luz Ayda Pastrana, de Cambio Radical, criticó que el Gobierno Nacional esté lanzando propuestas y haciendo eventos con exparamilitares cuando las disidencias de a poco se vienen tomando el país. “Seguimos viviendo días de desesperanza y miedo. Presidente Gustavo Petro, ministro de Defensa Iván Velásquez, nuestros territorios permanecen en la incertidumbre y el temor. Como ciudadana, rechazo este tipo de hechos que solo agravan la angustia de nuestros territorios. La región surcolombiana no puede seguir sufriendo las consecuencias del abandono y la violencia”.
Acuerdo sin consenso
De la misma manera, la representante a la Cámara por el partido Alianza Verde, Catherine Juvinao, explicó que “la izquierda y la derecha están unidas cuidándose los unos a los otros. Definitivamente el único acuerdo nacional posible en este país es hablar de cambio para que nada cambie”.
A su turno, el expresidente Iván Duque destacó varios errores procedimentales de Gustavo Petro en el Gobierno, afirmando que “la beatificación de criminales y dictadores es la consigna del gobierno colombiano. En paralelo, la intimidación a los empresarios, la presión para decapitar a los directores de medios de comunicación, la destrucción de los sectores productivos, la nacionalización de sectores mediante la asfixia financiera y la intervención regulatoria son su camino para la ruptura institucional. Ni el Congreso ni las cortes pueden prestarse para esta institucionalización del crimen”.
A su turno, el senador del Partido Conservador Nicolás Echeverry señaló: “Es desesperanzador ver un gobierno sin rumbo ni liderazgo, que demuestra desinterés hacia quienes no están de acuerdo. Ignorar a quienes critican solo muestra falta de asertividad. Liderar es escuchar y concertar, y esa debería ser una prioridad para el Gobierno”.