“Invito comedidamente”a los ex presidentes a que depongan sus odios y rencores y nos dediquemos más  a pensar en el país y en su futuro”, tuiteó ayer el presidente Juan Manuel Santos.

El gobernante intervino así en la polémica que sostienen hace un par de días los ex presidentes Andrés Pastrana, César Gaviria y Ernesto Samper a propósito de las revelaciones hechas por el primero de ellos en el libro Memorias Olvidadas, publicado por Penguin Random House y escrito por Gonzalo Guillén con base en revelaciones del exmandatario.

En declaraciones a medios radiales, Pastrana acusó a Gaviria de ser "el eslabón perdido del proceso 8.000", porque, dijo, tras revelarle las grabaciones contenidas en los narcocassettes, nunca obtuvo una respuesta precisa y que, por el contrario, desde el Gobierno le habrían sugerido sellar "un pacto de caballeros" para mantener en reserva las grabaciones.

Lo que dijo Pastrana

En la presentación del libro, el expresidente Pastrana reveló que en 2000 le llegó una carta firmada por los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez, extraditados jefes del cartel de Cali, en la que le aseguraban que Samper sí había recibido dineros del narcotráfico para su campaña.

En la carta, fechada en junio 12, los Rodríguez precisaron, según Pastrana, que "no fue a sus espaldas ni mucho menos a espaldas de los directivos de la campaña" presidencial de Samper que entraron los dineros del narcotráfico a la campaña.

El propio Pastrana dijo que infiere que los Rodríguez estaban resentidos al ver las imágenes en las que el Gobierno celebró su captura y decidieron enviar la carta.

“Lo que yo nunca supe y lo que no sabíamos los colombianos es que Gaviria también sabía. Cuando me puse a armar el rompecabezas de todo el proceso 8.000 dije: acá falta una pieza del rompecabezas y ese eslabón perdido, esa pieza que faltaba, es el expresidente Gaviria, porque él sabía y Gaviria nunca me dijo a mí que ese cassette era cierto y era válido”, sostuvo Pastrana, considerando que si el entonces jefe de Estado le hubiera dado validez a la cinta “hubiera cambiado la historia de Colombia”.

Según el expresidente Pastrana, el entonces ministro de Defensa, Rafael Pardo, “me propone que si hacemos un pacto de silencio, que yo no diga que le entregué los cassettes al presidente y que ellos no dicen que los recibieron. Pacto que nunca acepté”.

Otra de las revelaciones del libro es que cuando fue secuestrado por Pablo Escobar, este lo quería para negociar la no extradición de narcotraficantes a Estados Unidos, pero que quien quería matarlo no era el extinto narcotraficante sino el exministro liberal tolimense Alberto Santofimio Botero, condenado a 24 años de cárcel por ser el coautor intelectual del magnicidio de Luis Carlos Galán.

Pastrana explicó que John Jairo Velásquez, alias Popeye, jefe de sicarios de Escobar, le dijo que “Santofimio fue hasta la finca El Bizcocho y lo que le pidió a Pablo Escobar es que asesinara a Andrés Pastrana, porque iba a ser presidente de Colombia, iba a ser un peligro para los extraditables y los narcotraficantes”.

Citando a Velásquez, Pastrana precisó que fue Escobar quien determinó no matarlo considerando que les servía más vivo que muerto.

Tras la presentación del libro, Pastrana admitió sentir temor: "La verdad es que siempre hay temor cuando uno cuenta la verdad de todos estos hechos de la historia".

Lo que respondió Gaviria

“El cuento del eslabón perdido no lo entiendo sino como el remordimiento que acompaña al doctor Pastrana por no haber tenido el coraje de poner en conocimiento de los colombianos la existencia de los narcocassettes, antes de las elecciones”, declaró el expresidente Gaviria en respuesta a lo dicho por Pastrana.

“No recuerdo, además, si él informó entonces a los periodistas que las acusaciones que allí se oían se referían a las dos campañas, no solo a la del doctor Samper”, agregó Gaviria.

En concepto del exmandatario liberal, "como se está comportando el presidente Pastrana, lo que toca pedir es su interdicción judicial porque está como loco de atar. Francamente lo que ha dicho no se entiende desde ningún punto de vista. De manera que pregúntenle ustedes a él: ¿A qué hora se enloqueció? Infortunadamente el presidente Pastrana se nos ha vuelto mentiroso, mitómano y fantasioso".

El expresidente Gaviria manifestó que "el contenido de la cinta refería una significativa contribución del cartel de Cali a las dos campañas presidenciales, la del candidato Samper y la del candidato Pastrana".

Agregó que "el expresidente Pastrana no hizo mayores solicitudes diferentes a las de dejar en mis manos las cintas que él dijo recibió de manera anónima".

"Pastrana respira amargura y resentimiento y no aporta pruebas, sino afirmaciones mentirosas. Yo tengo mi conciencia tranquila sobre la rectitud de mi conducta y no estoy seguro de que algún día no aparezcan las pruebas que vinculen la campaña de Andrés Pastrana con el cartel de Cali, como mencionan las grabaciones", señaló Gaviria.

 Lo que comentó Samper

El expresidente Samper calificó al exmandatario Pastrana de estar “narcoobsesionado” con el tema del Cartel de Cali y el proceso 8.000, luego de casi 20 años de efectuarse los polémicos hechos.

Según tuiteó Samper, "el presidente César Gaviria procedió correcta y oportunamente en el manejo de la narcoobsesión de Andrés Pastrana".