EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es la preocupación que tienen desde el Raizal Council por el aumento poblacional en San Andrés?
WALT HAYES: Son muchas porque la densidad poblacional de la isla de San Andrés ha incrementado y por ende termina generando gran cantidad de problemas debido a los mismos límites que impone la isla, que es pequeña con 27 kilómetros cuadrados.
Esos problemas de sobrepoblación están varios aspectos: en el ambiental pues obviamente se ha empezado a construir en lugares de protección, es decir, en humedales, manglares y lugares que tenemos como espacios de protección ambiental.
Entonces se han estado haciendo ventas de lotes y las personas han empezado a hacer construcciones y urbanizaciones en áreas rurales, y eso termina generando daños ambientales puesto que las áreas rurales no cuentan con alcantarillado y en algunos casos tampoco con servicio de agua.
Por el otro lado el aumento de población y no habiendo muchas formas de habitación pues genera hacinamiento en muchos lugares, en muchos barrios, y eso termina generando conflictos sociales que se traslucen después en inseguridad y alteración al orden público.
De ahí, eso se traslada también al plano laboral, ya el raizal empieza a sentirse desplazado laboralmente, ya no hay espacios laborales, y así sucesivamente vamos generando más problemas.
ENS: ¿Qué pasa con el decreto expedido en los años 90 que restringe la residencia en la isla?
WH: Se ha hecho un ejercicio, no puedo decir tan mal porque igual si no existiese lo poquito que hay ahí pues esto se desbordaría mucho más. Hay una norma de control de circulación y residencia que no ha sido muy efectiva en el sentido de que la Oficina a cargo no tiene todas las herramientas jurídicas y administrativas para poder ejercer cabalmente frente a este problema.
Se suma a eso que se ha dejado como si fuera un problema netamente local, y de pronto el Gobierno nacional no le ha puesto también la mano a esto porque en realidad ya es un desborde que es un tema nacional, y la única ley que se hizo no está siendo muy efectiva en su control.
Hay que tener en cuenta que por ejemplo la Constitución habilitó al señor Presidente de la República en su momento y aún tiene facultades para ejercer dicho control.
Encontramos contraste en el sentido de que esas normas administrativas fueron hechas para definir una densidad poblacional de equilibrio, y a la fecha el Gobierno no ha hecho efectivo eso.
ENS: ¿Cuál es aproximadamente la población residente en San Andrés en estos momentos?
WH: Cuando la isla estuvo en 40.000 o 50.000 personas, aunque teníamos problemas por lo menos había mejor convivencia y menos daño y menos presión hacia los recursos naturales. Hoy día se estima que estamos por encima de los 100.000 habitantes aquí en la isla, aunque el censo oficial del DANE está en una cifra cercana a los 80.000.
ENS: ¿Hay posibilidad de que residentes en San Andrés vayan a vivir a Providencia?
WH: Eso no se puede dar porque Providencia es más reducido que San Andrés en su tamaño y requiere de mayor protección en el caso ambiental. O sea la misma isla en su dimensión no da para generar una economía superior a lo que hay ahorita. Providencia tiene alrededor de unos 6 mil habitantes y tiene unos 16 kilómetros cuadrados no más.