Ante la decisión del juez 52 de control de garantías de Bogotá que se abstuvo de imponer medida de aseguramiento en contra del empresario Leo Eisenband, la Fiscalía presentó recurso de apelación, el cual será resuelto en segunda instancia por un juez de conocimiento.
Eisenband es investigado por el ente acusador porque entre los años 2008 y 2013, al parecer, participó como interviniente en el proceso ilegal de compra y venta del centro comercial Villa Country en la ciudad de Barranquilla (Atlántico), el cual estaba en custodia de la entonces Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE) -suprimida y liquidada en el año 2011 mediante decreto 3183 del Ministerio de Justicia-, y cuyo agente liquidador era Camilo Bula.
Al predio le redujeron en dos mil metros cuadrados las zonas privadas, también fue avaluado irregularmente el valor catastral determinando un precio de $22.000 millones a pesar de que el valor comercial era de $38.000 millones. Aun así, el predio fue vendido en $18.000 millones en septiembre de 2010.
Peritos del CTI establecieron que el valor comercial del bien era de $40.000 millones, por eso al realizar un cruce de valores se determinó un detrimento patrimonial de $23.592’670.000.
De acuerdo con la Fiscalía, el empresario Leo Eisenband supuestamente se concertó de manera ilegal con el director de la DNE para la época, Carlos Albornoz; y el agente liquidador del centro comercial Villa Country en Barranquilla, Camilo Bula, para presuntamente apropiarse del inmueble y sacar provecho económico de su administración.
En ese sentido, según la Fiscalía, se habrían cometido las siguientes irregularidades:
Se concertaron coimas por valor de dos mil millones de pesos a los intervinientes en el ilícito. El señor Carlos Albornoz, como director de la DNE, supuestamente recibió 800 millones de pesos.
Con el apoyo de Camilo Bula, agente liquidador del centro comercial Villa Country, realizó asambleas y actas para modificar presuntamente el reglamento de la propiedad y así disminuir las áreas privadas.
En una reunión se acordó que sería vendida la propiedad como un todo y no por locales y garajes.
El área del centro comercial fue disminuida de 15.000 metros cuadrados a 12.000, lo que redujo el precio del inmueble.
A través de peritos y una promotora encargada de la venta del inmueble se estableció un precio de venta de 22.000 millones de pesos a pesar del costo del avaluó comercial.
Eisenband aparentemente entregó una propuesta comercial para la compra del centro comercial un día antes de que se hiciera pública su puesta en venta; licitación que tuvo solo dos días de vigencia y a la cual solo se presentó un oferente.
En septiembre de 2009 fue firmada una escritura pública para la venta del centro comercial por 18.000 millones de pesos, 4000 millones por debajo del precio y más de un 50% del valor comercial real.
La tenencia fue asumida por Eisenband sin hacer el pago total de la compra. Además, el empresario arrendó los locales y garajes a través de una fiducia, y este dinero fue usado para abonar a la misma deuda.
A la fecha el empresario no ha cancelado un saldo de 1.340 millones por la adquisición del centro comercial desde hace 9 años.
Los delitos
Por estos hechos la Fiscalía imputó los cargos de: peculado por apropiación; contratación sin el cumplimiento de requisitos legales; enriquecimiento ilícito en favor de terceros; falsedad en documento público, y fraude procesal.
El empresario no aceptó su responsabilidad y mientras se resuelve el recurso enfrentará el proceso en libertad.