El gobierno de Estados Unidos exhortó este viernes a las autoridades de Ucrania que permitan que las protestas previstas para este fin de semana se desarrollen de forma pacífica y eviten cualquier enfrentamiento con los manifestantes.
"Es imperativo que las manifestaciones de este fin de semana puedan realizarse de forma pacífica", dijo la portavoz adjunta del Departamento de Estado, Marie Harf, sobre las masivas protestas convocadas la mañana del domingo en Kiev por opositores del presidente Viktor Yanukovich.
"Por supuesto vamos a permanecer atentos a lo que suceda en los próximos días", agregó.
El miércoles, la policía antidisturbios intentó desalojar sin éxito a los miles de manifestantes concentrados en el centro de la capital ucraniana, que reclaman la dimisión del presidente.
La oposición aceptó este viernes sentarse a negociar con Yanukovich, quien ofreció amnistiar a los manifestantes detenidos. Sin embargo, consideraron que "esta mesa redonda es solo un simulacro".
Ucrania vive desde finales de noviembre una ola de virulentas manifestaciones luego que Yanukovich decidió renunciar a un acuerdo de asociación con la Unión Europea y acercarse al gobierno ruso de Vladimir Putin.
Oposición ucraniana: negociaciones son "simulacro"
La oposición ucraniana consideró un "simulacro" las tensas negociaciones con el poder llevadas a cabo este viernes para apaciguar la tensión, en la cuarta semana de protestas y en vísperas de nuevas manifestaciones proeuropeas convocadas para el fin de semana en Kiev.
"El presidente (de Ucrania, Viktor Yanukovich,) no ha tenido en cuenta ninguna de nuestras exigencias. Esta mesa redonda es solo un simulacro", declaró a la salida el campeón del mundo de boxeo y líder del partido Udar (Golpe), Vitali Klitshko, citado por la agencia Interfax.
Las negociaciones se produjeron en una situación de gran tensión de cara al fin de semana, cuando opositores y partidarios del gobernante Partido de las Regiones convocaron manifestaciones en el centro de la capital.
Además de Klitshko, también participaron los líderes opositores Oleg Tiagnibok, del partido nacionalista Svoboda (Libertad), y Arseni Yatseniuk, a la cabeza de la formación de la líder opositora encarcelada Yulia Timoshenko.
A excepción de una promesa de amnistía para los detenidos durante las últimas semanas formulada antes del encuentro por el presidente, ninguna propuesta concreta salió de esta reunión, a la que estaban invitados también decenas de personalidades, entre ellas, líderes religiosos.
"Insto a todos los ucranianos que están en las calles a calmarse y a poner fin a la confrontación", declaró Yanukovich al final del encuentro.
La oposición, que reclama la dimisión del gobierno y la firma del acuerdo de asociación con la UE suspendido a finales de noviembre, convocó nuevas manifestaciones masivas este fin de semana, fortalecida por el apoyo de los representantes de la Unión Europea y de Estados Unidos, así como por el desalojo policial frustrado del pasado miércoles.
La próxima manifestación está prevista el próximo domingo a las 12H00 (10h00 GMT).
"Me dirijo a usted, Viktor Yanukovich. Usted es personalmente responsable de lo que ocurre en el país", dijo Klitshko durante el tenso encuentro, sentado frente al presidente de Ucrania.
"Sabemos que existen planes para solucionar la situación por la fuerza. Esto tendría consecuencias catastróficas para el país y para usted personalmente", añadió el boxeador y candidato declarado a la presidencia del país.
El ministro lituano de Relaciones exteriores, Linas Linkevicius, cuyo país ejerce la presidencia de turno de la UE, indicó que su homólogo ucraniano le aseguró que no se emplearía la fuerza contra los manifestantes.
El ex presidente de Ucrania Leonid Kravchik lanzó la iniciativa de esta mesa redonda, tras un intento de mediación la pasada semana con otros ex jedes de estado, Leonid Kuchma y Viktor Yushenko.
La iniciativa recibió el apoyo el viernes del oligarca más rico del país, el hombre de negocios Rinat Akhmetov, quien denunció el uso "inaceptable" de la fuerza contra los manifestantes e instó a negociar.
El país entró el jueves en la cuarta semana de movilizaciones, motivadas por la negativa de Ucrania a firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE) y optar por un acercamiento a Rusia.
Rusia denuncia "injerencias groseras"
El presidente ruso, Vladimir Putin, cuyo país está acusado directamente por los europeos de presionar Ucrania, destacó el jueves que una aproximación entre Kiev y Moscú respondería a "intereses económicos reales".
Su primer ministro, Dimitri Medvedev, calificó por su parte el viernes las visitas de responsables europeos o estadounidenses a los manifestantes de la plaza de la Independencia como "una grosera injerencia en los asuntos internos de un estado soberano".
La Unión Europea prometió apoyo financiero de la UE "a la altura de las ambiciones de Ucrania", si el país tomaba un "compromiso claro" con la ruta europea.
El comisario europeo de Política de Vecindad, Stefan Fule, rehusó, sin embargo, ofrecer firmas.
El primer ministro ucraniano había solicitado el miércoles a la UE una ayuda de 20.000 millones de euros par firmar el acuerdo./AFP