Las pocas asistencias de público los estadios en donde se disputó la última jornada de los cuadrangulares semifinales de la Liga Postobón I, dijeron a las claras la trascendencia que tenían estos partidos.

Con los dos finalistas, Santa Fe y Pasto, definidos desde la fecha anterior, no había nada que motivara a acudir a los estadios y con mayor razón habida cuenta que los dos clasificados decidieron llevar nóminas emergentes a Tunja y Cali.

Los pocos aficionados que decidieron acompañar a sus equipos, no obstante, disfrutaron de buenos espectáculos, así como los que asistieron a los estadios de Techo para ver Equidad-Itagüí e Ibagué para observar a Tolima-Huila.

En Tunja, Santa Fe, que no utilizó a los titulares habituales, dejó ver porque está metido en la pelea por el título al igualar a dos goles, con el Boyacá Chicó que tenía la necesidad de sumar por aquello de la reclasificación.

El partido resultó interesante por lo que hicieron los jugadores que saltaron al gramado del estadio boyacense y sobre todo porque a penas a cinco minutos del inicio, Oscar Rodas aprovechó las desatenciones defensivas del loca y puso a los Cardenales adelante en el marcador.

Pero al minuto 25, la joven promesa del equipo dirigido por Alberto Gamero, el delantero Juan David Pérez, venció la defensa rojiblanca y puso el empate en el marcador.

Ya en la segunda mitad, de nuevo la visita se fue arriba en el tanteador con autogol de Pedro Pino, pero el local de nuevo con Pérez señaló la paridad.

Por su parte en Bogotá, Equidad, que generalmente es protagonista de primer orden en las semifinales y en sus seis años en la 1-A ha disputado dos finales, se despidió de los 150 hinchas que lo acompañaron con una victoria 2-1 ante Itagüí, cuyo técnico Hernán Torres se quedó en Bogotá para asumir el mando en Millonarios.

Carmelo Valencia, que se había convertido en solución de gol para los orientados por Alexis García pero que no estuvo fino en la liguilla, volvió a convertir y lo hizo en dos ocasiones para llevar a su equipo a la victoria, con lo que suma 36 puntos en la reclasificación.

Itagüí, que despertó muchas expectativas, marcó un golazo de tiro libre por intermedio de Piedrahita, quien posteriormente estuvo a punto de repetir.

Fue, el de Techo, un partido entretenido, que muy poco público disputó y que sirvió de despedida al técnico Torres que a partir de hoy, con todo su cuerpo técnico asume la dirección de Millonarios.

Por el Grupo A, Cali, cuyo técnico, Julio Comesaña aseguró que quería despedirse con victoria pese a que ya estaba eliminado, cumplió su objetivo gracias a las ventajas que le dio el Pasto.

José Flavio Torres optó por darle descanso a la formación titular y llevó un equipo juvenil que, en los primeros minutos intentó oponer resistencia, pero nada puso hacer ante la experiencia de sus rivales, encabezados por el golero Mondragón, el volante Caracho Domínguez, aunque los goles los convirtieron Félix Micolta, Brayan Perea y Diego Peralta.

Y, Atlético Huila volvió a caer en su último partido del torneo, esta vez ante Deportes Tolima que logró el triunfo con dos anotaciones del paraguayo Robin Ramírez, quien de paso se convirtió en el goleador del torneo con 13 dianas.

En la jornada se convirtieron dos golazos, uno del de Piedrahíta en Bogotá para Itagüí y otro en Tunja para el Boyacá Chicó por Juan Mahecha.

Ahora solo se espera el inicio de la final en Pasto, con un local que busca su segunda estrella y un visitante que pretende poner fin a una sequía de 37 años sin dar una vuelta olímpica.