LOS DELEGADOS del presidente venezolano Nicolás Maduro y de su rival Juan Guaidó tendrán su primer cara a cara en Oslo la semana próxima, en el marco de la mediación noruega, anunció el líder opositor el sábado.
Los enviados de Guaidó “conversarán tanto con el gobierno de Noruega como con representantes del régimen” de Maduro, indicó en un comunicado el jefe Parlamentario, reconocido como Presidente Interino de Venezuela por medio centenar de países.
Sin mención al encuentro bilateral, Maduro tuiteó: “Sale hacia Oslo nuestra delegación con buena disposición para trabajar la agenda integral acordada y avanzar en la construcción de buenos acuerdos”.
Esta será la primera vez en que ambas partes tendrán contacto directo, lo que representa un avance desde que Noruega diera a conocer su mediación la semana pasada.
El gobierno noruego había anticipado más temprano este sábado el regreso de los delegados a Oslo la semana próxima, dando continuidad a la mediación del reino escandinavo.
“Informamos que los representantes de los principales actores políticos de Venezuela han decidido regresar a Oslo la próxima semana para continuar un proceso facilitado por Noruega”, anunció su Cancillería en una nota.
Las autoridades de Noruega reiteraron su “compromiso de seguir apoyando la búsqueda de una solución acordada entre las partes para Venezuela”, de las que elogió “sus esfuerzos” y “su disposición”.
Pese a aceptar la mediación noruega, Guaidó dejó en claro que, como ya lo había dicho, cualquier negociación es la que “lleve al cese de la usurpación” de la presidencia por parte de Maduro, “transición y elecciones libres”.
“Aquí más nunca nos van a confundir con un falso diálogo”, había lanzado horas antes frente a centenares de seguidores en Carora, estado Lara.
Guaidó se ha mostrado cauto ante esta iniciativa, a sabiendas de la impopularidad del diálogo entre los opositores, decepcionados por cuatro intentos fallidos desde que llegó Maduro al poder en 2013.
“No entraremos en procesos dilatorios que retrasen la libertad y solución al caos que padece nuestro país (…) Hemos hecho todo y vamos a insistir, porque hoy combinando todas las estrategias, todas las herramientas, es que vamos a lograr terminar de dar el paso definitivo”, explicó en Carora.
Entre sus herramientas, Guaidó enumeró la movilización popular, la presión diplomática, la cooperación internacional, el Grupo de Contacto, la diplomacia, Noruega y el Grupo de Lima. “Todo lo que vamos a hacer es de frente y de cara a nuestra gente”, aseguró.
A su vez, el gobierno de Noruega tampoco habla de diálogo ni de negociaciones y no da detalles sobre lo que denomina “contactos preliminares”.
Para Guaidó y sus partidarios, el presidente Maduro es un “dictador”, un “usurpador” que permanece en el poder tras la elección presidencial “fraudulenta” del año pasado.
Maduro, por su parte, califica a sus adversarios de la oposición de “golpistas”, apoyados por Estados Unidos.
El 17 de mayo, la radiotelevisión pública noruega NRK, aseguró que las conversaciones de Oslo, que se mantuvieron en secreto, duraron “varios días”.
Simultáneamente, Guaidó había dado instrucciones a su representante en Estados Unidos de gestionar una reunión con funcionarios de los departamentos de Estado y de Defensa de ese país, que es su principal aliado internacional y que no descarta la opción militar.
El líder opositor defendió el envío de delegados a Oslo dentro de una mediación de Noruega en la crisis política venezolana, advirtiendo a críticos de su propio bando con esta vía de que pueden terminar siendo cómplices “de la dictadura” de Nicolás Maduro.
“El que no entienda que tenemos que jugar en todos los tableros, que tenemos que tener presencia activa en todos los lugares, (...) entonces está cooperando con otra causa”, indicó Guaidó frente a centenares de seguidores en Barquisimeto, también en el estado Lara”, dijo ayer