Si en los próximos 18 meses, 31 edificaciones de la ciudad que se encuentran en gran estado de abandono no son habilitadas y utilizadas serían subastadas a grupos privados y constructores que desarrollarían nuevos proyectos.

Así lo anunció la secretaria Distrital de Hábitat, María Mercedes Maldonado, al señalar que la mayoría de los predios se encuentran en el centro de la ciudad en los corredores de la Carrera 10º y la Avenida Caracas entre calles 13 y 26.

Según Maldonado, estas subastas se podrán hacer gracias a la Ley 1537 firmada por el Gobierno nacional que también permitirá acelerar el plan de renovación del centro de Bogotá, ya que los predios serán ofrecidos en las subastas preferiblemente a constructoras que harán edificios de uso comercial y habitacional para densificar el centro de Bogotá.

La administración espera que las primeras subastas se comiencen a realizar en el segundo semestre de 2015.

La determinación está en la resolución publicada el pasado 4 de febrero de la Secretaría Distrital del Hábitat donde está un listado de 31 edificaciones que actualmente presentan deterioros en sus condiciones y su conservación, y que según concepto técnico del Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger, antes Fopae) presentan amenaza de ruina.

La resolución expedida por la Secretaría Distrital de Hábitat se basa en la Ley 1537 de 2012 y la Modificación Excepcional al Plan de Ordenamiento Territorial (Decreto 364 de 2013), según las cuales habrá lugar a la iniciación de enajenación forzosa en pública subasta, de propiedades que no tengan resueltos problemas de estabilidad, seguridad y salubridad de la edificación y que impidan su uso según lo previsto en las normas urbanísticas. Esta decisión da continuidad a las declaratorias de desarrollo y construcción prioritaria que aplica para terrenos urbanizados o no edificados.

Mediante visitas programadas a los predios, la entidad logró identificar que las edificaciones están en Antonio Nariño, Barrios Unidos, Bosa, Candelaria, Engativá, Kennedy, Los Mártires, San Cristóbal, Santa Fe y Teusaquillo, no han tenido el debido mantenimiento y eso impide un uso apropiado del inmueble.

El documento firmado por la secretaria Maldonado explica que de no ser habilitadas y utilizadas en un plazo máximo de 18 meses, las edificaciones saldrán a subasta pública por parte de la entidad. De llegar a esa instancia, los predios podrían ser destinados al uso de vivienda de interés prioritario o social, afirmó la representante de la cartera del Hábitat y agregó que en las próximas semanas se declararán más edificaciones abandonadas o subastadas.