Este croquis lo podemos dibujar en distintas tonalidades de acuerdo con los liderazgos más sobresalientes y los temas que ellos representan.
El primer liderazgo lo tiene el presidente Santos y su tonalidad está representada en la tercera vía, más conocida como la PROSPERIDAD.
En segundo lugar está el ex presidente Uribe, quien mantiene una alta popularidad, un nivel de influencia regional y su color es la SEGURIDAD.
El tercero lo ocupa Sergio Fajardo, quien con casi un millón de votos se hizo elegir Gobernador de Antioquia, la misma región que catapultó a Uribe. Su discurso se enfoca en el tema del no todo vale, traducido en LEGALIDAD.
Gustavo Petro, el dirigente más importante e impopular de la izquierda, quien se hizo elegir Alcalde de Bogotá en oposición a él mismo, pues así lo está demostrando, liderando el movimiento Progresistas como una vertiente del Polo “burocrático”. Su problema es la falta de MOVILIDAD.
Piedad Córdoba: Nadie duda que la ex senadora se ha ganado un aprecio en el espectro político de Colombia, a pesar de su imagen altamente negativa por sus vecindades con las Farc y Chávez. Y su papel para devolver a los secuestrados la ubican con la bandera de la LIBERTAD.
El regreso del péndulo. Lleva de nuevo a Colombia por el sendero de la reconciliación, pues hoy existe una gran corriente afín a la negociación política del país: el ex presidente Andrés Pastrana se jugó hasta su prestigio en un proceso de reconciliación frustrado por la mezquindad política de sectores interesados en arruinar esa meta, en cabeza de López, Serpa y Santos, quienes hundieron la reforma política que le entregaba a Pastrana las herramientas para la paz, cuyo color es la CIVILIDAD.
Averígüelo, Vargas. En este panorama, Vargas Lleras ha ido cayendo en un limbo político. Primero acompañó a Uribe en la Seguridad Democrática, pero lo abandonó, pues le pudo su ambición. Invitado al gabinete por Santos, que se creía era el portavoz de la Seguridad, Vargas se ubica en la línea que los uribistas llaman del “apaciguamiento”. Esto quiere decir que Vargas arranca como halcón y termina como paloma -cuento que ni él mismo se cree-. Una especie de Roy Barreras en ascenso. Vargas, sin política y sin tema, quiere horadar la política de tierras del ministro Juan Camilo Restrepo. En su desespero, Vargas siente disminuida su capacidad en el Interior de un ministerio sin Justicia.
En cambio, Restrepo aparece cómodo con la bandera que Santos le encomendó, según editorial de EL NUEVO SIGLO de este martes.
De Conservador a Verde. El Barquero supo de los ataques que Vargas le propina, cada vez que puede, al ministro Restrepo. Las zancadillas son permanentes, pues Vargas no renuncia al legado agrario de su abuelo. Incluso ya se especula con sacar a Juan Camilo para entregarle a Lucho Garzón esa cartera. O sea de Conservador a Verde.
Juan Sin Tierra. Separados los Ministerios del Interior y de Justicia, Vargas quiso hacerse nombrar Ministro de Vivienda, pero “Doña Uribita” se consolidó en esa cartera, asimilando los codazos vargaslleristas. Ahora Vargas, como cualquier Juan Sin Tierra, aspira a desplazar a Restrepo del Ministerio de Agricultura, que maneja la única bandera del Gobierno.