Aunque tienen orígenes muy distintos y nacieron casi que con un siglo de diferencia, buscan un mismo fin: resaltar el papel de la mujer y el hombre en la sociedad.
Nos referimos a las celebraciones mundiales conocidas como el Día Internacional de la Mujer y su correspondiente para el Hombre, efeméride que tiene lugar, por declaración de la ONU el 19 de noviembre, pero que en el mundo católico se trasladó para el 19 de marzo porque se asoció con la fiesta religiosa de san José, el esposo de la Virgen María y padre putativo de Jesús.
Como se sabe, el Día Internacional de la Mujer fue institucionalizado por Naciones Unidas en 1975, el 8 de marzo, en reconocimiento a la lucha de la mujer en pie de igualdad con el hombre en la sociedad y en su desarrollo íntegro como persona. Sin embargo, muchísimos años atrás, inclusive antes de los comienzos de ese siglo, las mujeres habían comenzado su “lucha emancipadora” y por el reconocimiento, en condiciones de igualdad, de sus derechos.
Años después de establecido el de la mujer, 17 exactamente, un profesor de la Universidad de Missouri, Kansas, decidió promover un día para el hombre para fomentar la salud y el bienestar masculinos. Su idea fue extendiéndose hasta el punto que en más de 50 países se celebra.
Así, en 2009, el Comité de Coordinación del Día Internacional del Hombre lanza los seis pilares de esta efeméride: promover modelos masculinos positivos (personas del común con vidas dignas y honradas), celebrar sus contribuciones positivas a la sociedad, a la familia, la comunidad, el cuidado de los niños y el medio ambiente; promover su bienestar físico, emocional y espiritual: poner de relieve la discriminación de que muchas veces son objeto; mejorar las relaciones de género y crear un mundo más seguro y mejor.
En Colombia, como en todos los países de confesión católica, este DIH se asoció con la festividad de San José, un modelo de humildad y protección, ejemplo para la humanidad.
EL NUEVO SIGLO digital consultó con una fuente eclesiástica las razones por las cuales se decidió trasladar la celebración del Día del Hombre con la festividad de San José, el 19 de marzo:
- La Biblia relata la concepción, vida, pasión y muerte de Jesús y siempre a su lado está su madre, la Santísima Virgen María. ¿Qué pasó con San José?
En el evangelio de Mateo se menciona a José como el vínculo con la descendencia del rey David y de esa manera se cumplen las promesas hechas del salvador de la descendencia de David. Luego, durante la vida pública, se menciona a Jesús como el hijo del carpintero (artesano) de Nazaret. La intención de los relatos de los evangelios se centra en la acción de Jesús de cara a la formación de los discípulos y los episodios relevantes para la vida de los cristianos. Debido a eso, el silencio de la obra de José. Estos vacíos que dejan los evangelios fueron llenados por los relatos que llamamos “apócrifos” y en ellos se relata la muerte de san José para explicar las lagunas en la información. A partir de los relatos “apócrifos” surgen las tradiciones de la muerte de San José y el modelo de entregar la vida en paz a Dios.
¿Por qué se definió el 19 de marzo como la fiesta religiosa de San José?
Según la información de M. Righetti (Historia de la Liturgia), el 19 de marzo en el calendario de los romanos se celebraría la fiesta de la diosa Minerva, patrona de los artesanos, y dada la vinculación de José con ellos, probablemente los cristianos quisieron sustituir esa fiesta romana proponiendo la celebración de san José. El papa Pío IV (1559-1565) aprobó la fiesta de san José el 19 de marzo.
Al celebrarse en el mundo católico este día del hombre el mismo día de la fiesta de San José, ¿qué mensaje quiere dar la Iglesia?
El evangelio de san Mateo dice que José es un hombre “justo”, que en el lenguaje bíblico significa “santo”. El mismo evangelio señala la vocación y la misión de José de ser protector de Jesús niño y de María, su madre, y cuando éstos se ven amenazados por la persecución de Herodes huye con ellos a Egipto. De ahí, entonces, esta responsabilidad de protector.
Así las cosas, el Día del Hombre es un reconocimiento a su valor y aporte dentro de la familia y la sociedad así como a la responsabilidad que tiene dentro de todos los ámbitos del diario vivir.