¡Llegaremos en un marco de gobernanza, con gobernabilidad, políticas públicas e inversión social a esta comunidad!, exclamó un político en un barrio de alguna ciudad de Colombia y Andrés, un joven de 15 años junto a su madre Diana, lo escucharon atentamente.
Al llegar a casa el joven le dijo a su mamá que el señor habló muy bonito, con gran poder de convencimiento, pero le pidió que por favor le explicara qué es la gobernanza, la gobernabilidad, las políticas públicas y la inversión social, a lo que ésta respondió después de un profundo silencio que no sabía.
En esta exclamación con la que comienzo hoy esta columna, en cuatro palabras resume lo que a mi juicio los gobernadores y alcaldes de este país verdaderamente tendrían que dedicarse a hacer cuando llegan por elección popular a esta dignidad. No deberían preocuparse por nada distinto que a respetar la gobernanza, tener gobernabilidad, implementar políticas públicas y generar inversión social. ¡El resto es cuento!
El problema es que muchos políticos lo dicen, pero no saben qué es, qué significa y obviamente nosotros, o sea sus electores, menos. Es como un mundo de confusión en el que nadie entiende nada, pero en el que algunos siempre logran su cometido: llegar al poder.
Pero ¿qué es o cómo hacemos para que nosotros podamos entender estos términos? ¿Cómo simplificamos conceptos para que no nos confundan?
Lo que le pasó al joven Andrés y a su madre Diana, oyendo al muy querido político, sucede más de lo que nosotros creemos en nuestro país, por eso es urgente simplificar a los políticos, pero también simplificar la política con un enfoque relacionado a que como ciudadanos entendamos no sólo lo que hacen nuestros gobernantes, sino cómo lo hacen, pero ante todo qué significa.
Gobernanza no es nada distinto al conjunto de leyes, reglas, normas u ordenamiento jurídico al que se someten las personas al realizar una actividad. Gobernabilidad se refiere al grado de coordinación y entendimiento en el que se desenvuelve un gobernante con los demás actores políticos, lo que le permite a éste trabajar en un estado de equilibrio, legitimarse y responder con acciones eficientes a las necesidades de una sociedad.
Por otra parte muchos hablamos de políticas públicas, pero no entendemos su significado y trascendencia. Hay un maravilloso libro del profesor colombiano Gonzalo Ordóñez titulado “Manual de Políticas Públicas”, en donde define a ésta como “un conjunto de acciones implementadas en el marco de planes y programas gubernamentales diseñados por ejercicios analíticos de algún grado de formalidad en donde el conocimiento aunado a la voluntad política y los recursos disponibles, viabilizan el logro de objetivos sociales”. En pocas palabras son acciones públicas que resuelven problemas, acompañadas de metodología y enfoque. Por último la inversión social no es nada distinto a todo el gasto público que va destinado a mejorar la calidad de vida de la gente.
En Colombia los políticos la han vuelto incomprensible a la política y nos hemos olvidado de lo fundamental: lo que desde ella se hace en beneficio de la gente.