¡Levanta la voz! | El Nuevo Siglo
Sábado, 6 de Febrero de 2021

“¡Levanta la voz por los que no tienen voz!

 ¡Defiende los derechos de los desposeídos!

 ¡Levanta la voz, y hazles justicia!

 ¡Defiende a los pobres y necesitados!”

 Proverbios 31:8-9

En el siglo XVIII en Inglaterra se levantó un valiente para elevar su voz en favor de la abolición de la esclavitud, una práctica inhumana y totalmente contraria a la dignidad y libertad. Su nombre era William Wilberforce y su lucha duró años hasta que por fin se declaró la abolición de la esclavitud por el Parlamento inglés y paulatinamente, los esclavos, fueron obteniendo su libertad. Tiempo después, se fue proclamando la libertad de los esclavos  en otras naciones, gracias a lo sucedido en Inglaterra.

En el Parlamento inglés se encuentra el nombre de Wilberforce como uno de los personajes más importantes de la historia inglesa.

Pero, ¿por qué el hijo de un próspero comerciante, como lo era Wilberforce, haría algo así?  ¿Qué beneficio buscaba? La respuesta está en la fe. Wiberforce abrazó a fe en el Señor Jesucristo y su vida cambió completamente y el amor por los demás despertó, como un león dormido, en su corazón.

En la película de 2006, Amazing Grace, se puede ver la biografía de este hombre que no se quedó callado ante las dificultades de su tiempo, sino que levantó su voz por el necesitado y fue un instrumento en las manos de Dios para traer cambios positivos a su país y marcar la historia, dejando un legado de amor y servicio a los demás.

El mundo que vivimos hoy no es el mismo que el que vivía Wilberforce. Sin embargo, en pleno sigo XXI todavía vemos pobreza, injusticia, maldad, corrupción, violencia, odio, mentiras, trata de personas, migraciones masivas y crisis climática, entre otros.  Hay dolor, hay necesidad y podemos solo criticar o remangarnos y tomar parte de la solución de un mundo que sufre.

El próximo año tenemos elecciones al Congreso y a la Presidencia en Colombia,  un país que sufre dificultades económicas y sociales debido a la pandemia.  No podemos quedarnos de brazos cruzados, es necesario participar y tomar partido por la justicia, la verdad y la honestidad.

La indiferencia y la apatía son males conexos y muy peligrosos. Si nos quedamos cruzados de brazos, hay otros que no lo harán y pueden llegar a gobernar, y gobernaran según su criterio, que puede no ser el mejor.

La izquierda, el centro y la derecha disputarán esas elecciones. El país se encuentra fragmentado, polarizado y dividido. El odio en las redes es evidente.

Quizás, sea tiempo de pensar en nueva alternativa. Una que no sea de centro, de izquierda o de derecha, sino una según los modelos sabios y eternos de Dios para la nación.

Es tiempo de levantar la voz, unidos como gente de fe, por un nuevo país, por una Colombia libre de las cadenas de la corrupción, la violencia y la maldad. Por una Colombia más justa y más libre.

@feliperangel81

*Politólogo Universidad del Rosario.