La neutralidad de internet
“La India le prohíbe a Facebook violarla”
LA semana que termina será recordada en el futuro como verdaderamente crucial para la defensa y supervivencia de la neutralidad de la Internet, factor esencial para poder garantizar la gratuidad de su acceso y utilización. Se preserva así el derecho universal de todos los internautas a beneficiarse de la red de redes.
La India, sin lugar a dudas la democracia más grande del mundo, a través de su Autoridad Reguladora de Telecomunicaciones, TRAI, prohibió a Facebook ofrecer o cobrar tarifas discriminadas por servicios de datos, basados según contenidos. Esto significa que productos como Free Basics de Facebook o Airtel Zero, ofrecidos por esta compañía, no podrán ser operativos en este país.
Este es un singular precedente para la batalla que muchos gobiernos están librando con este gigante de las redes sociales para poder evitar el establecimiento de precios diferenciales. Alguien ha dicho que es una cruzada contra las pretensiones de querer convertir el océano que es la Internet en una piscina.
Igualmente esta valerosa y sabia decisión india (mil millones de personas no se equivocan) propina un duro golpe a las aspiraciones de las compañías telefónicas de todo el mundo que están tratando de imponer precios diferenciales en los servicios de datos y especialmente Marck Zuckerberg (de quien un crítico opinó que "sólo le falta el parche") que ha tratado de vender sus productos censurados argumentando que Free Basics permitirá "a millones, especialmente en las áreas rurales, acceder gratuitamente a un Internet especializado", cuando en realidad sólo están permitiendo un acceso restringido a sitios preseleccionados y sin mayor valor en cuanto a contenidos relevantes. Lo que va, sencillamente, en contravía de la neutralidad de la red, consagrada por la ONU, a UIT, la Unesco y la Comunidad Europea, entre muchas instituciones globales. La Fundación World Wide Web ha sentenciado que no puede haber una Internet abierta y otra cerrada. “Todos tenemos derecho a conectarnos con todos".
Los empeños de Facebook están propiciando una verdadera y peligrosa lucha en la Internet, entre "los que tienen", los abonados o los que pagan, y "los que no tienen" o los pobres y marginados de la red. Lo bueno de la decisión: fue el resultado de una gigantesca consulta popular, Lo malo: los vetados han reaccionado agresiva y desconsideradamente.
Lo grave para los colombianos es que nuestro país, en forma apresurada e inconsulta, cayó bajo el embrujo del pirata informático de marras y desde hace meses firmó una serie de acuerdos desconocidos para la opinión pública que no sabe cómo y en qué forma hipotecaron nuestros derechos e intereses. Chile, Brasil y México, en nuestra región, ya se habían negado a hacerlo. El señor ministro Luna está en mora de informar a todos los colombianos cómo marchan esos convenios clandestinos y cuál ha sido su balance.
Adenda:El ex alcalde Petro ha vuelto a sus andanzas subversivas y ahora quiere, a toda costa, hacerle invivible Bogotá a Peñalosa.