El elegido | El Nuevo Siglo
Jueves, 26 de Abril de 2018

LA carrera presidencial en Colombia realmente inició esta semana tras varios meses de fatigosa y tediosa campaña electoral.

En un mes serán las votaciones en primera vuelta y todos los escenarios parecen conducir a una segunda contienda en junio.

El agitado escenario político no ha influido mayormente en el clima de negocios.

Los empresarios siguen con sus proyectos de inversión y expansión, casi ajenos a la contienda electoral.

Los productores locales e inversionistas extranjeros han sostenido sus estrategias de crecimiento en medio de una economía de bajo crecimiento y moderado consumo.

Podría decirse que la mayoría de directivos, accionistas e inversionistas apenas comienzan a definir partido de cara a las elecciones del 27 de mayo.

Una característica según sondeos a compañías nacionales y multinacionales: aunque le dan crédito al avance de su campaña, no simpatizan con propuesta de Gustavo Petro.

Les causa dudas enfoque planteado por el candidato Petro sobre modelo de economía en un eventual mandato suyo. No se sienten cómodos con planteamientos del exalcalde de Bogotá.

No les inspira confianza posibilidad de que una candidatura de corte populista maneje los destinos del país.

En cambio, les suena la campaña de Iván Duque, a quien ven seguro y claro en su propuesta general de administrar la nación.

En el sector privado ven con buenos ojos posibilidad de que sea Duque el elegido en las urnas. Unos porque la presencia del expresidente Uribe les contagia confianza, y otros, porque el discurso de Duque lo ven aterrizado y acorde con expectativas nacionales.

Accionistas o dueños de empresas constituidas en Colombia opinan que el candidato Duque les transmite seguridad, pues en el peor o mejor de los casos, ya conocen el talante del expresidente Uribe.

A Duque lo ven más cercano a iniciativa privada y más lejana a inestabilidad en las reglas de juego.

Si hay algo que asusta a los hombres de negocios es que se den cambios súbitos en las reglas de juego para invertir, así como en garantías jurídicas.

Ningún inversionista quiere llevar sus capitales a una economía cambiante e inestable en el frente tributario, por ejemplo.

Consideran que Duque sería un Presidente de consensos.

A su vez, algunos directivos estiman que la campaña de German Vargas cada día pierde más brillo y claridad. Lo ven con síntomas de fatiga y con un discurso que no logra calar entre pobres y ricos.

Piensan que Lleras tiene algo de estadista y poco carisma para llegar a las gentes. Sin embargo, varios sectores de opinión consideran que tiene posibilidades de clasificar a segunda vuelta.

El concepto de empresarios es que ‘pelea’ en las urnas estará entre Petro y Lleras para disputarle a Duque la Presidencia en segunda vuelta.

 

Así las cosas, aunque impensable, de otro mundo, una fusión Lleras-Petro, sería la vía más corta para enfrentar a Duque. 

Como va hoy la carrera presidencial, podría tener que acreditarme para cubrimiento periodístico de la posesión de Duque el 7 de agosto. Pero quedan 30 días.