Covid y violencia | El Nuevo Siglo
Viernes, 7 de Enero de 2022

Frente a la emergencia por el coronavirus se abre una experiencia que pasará a la historia del país, y, en adelante aconseja impulsar cultura sin armas, para vivir primero como humanos, con estricta mente despejada, lejos de todo lo violento.

La Ética de las Profesiones Formativas es documento que despierta el cuidado en las teorías, análisis, incidencias de noticias y resultados en áreas que surten, al periodismo en América Latina y Europa, según se ocupa el sociólogo Guido Gatti, italiano, catedrático de la Facultad de Ciencias de la Universidad Salesiana en su país.  

El catedrático en documento a esta columna emite análisis, basado en la pérdida de valores frente a la ola violenta en Suramérica como los registrados en Venezuela en frontera con Colombia, en el límite entre las dos naciones en Arauca, penetrado por el ELN, hace varias semanas, con saldo de 23 víctimas.

Así, Colombia está llamada a ir al origen de brotes infecciosos que, durante décadas, por intoxicación con hechos en el escenario informativo han dejado como víctimas a agricultores y trabajadores de los dos países.

En las ciudades y periferias, con medianos y pequeños municipios, la incultura ciudadana impide vivir sano, y, por desinterés, olvida además deja crecer enfermedades. La queja del paciente es si hay dolor y herida. Se requiere reordenamiento porque invaden calles y avenidas.

Antes que la venta, la oferta de mercaderías debe conocer el lugar de residencia de los vendedores y su respectiva actividad comercial, viven a diario junto a los armados enfrentados a fuerzas policiales y militares.

Lo ofrecido está cubierto, en su mayoría, por polvo habitual en una vía o plazoleta, al margen del tránsito de automotores. Sin cubierta apropiada, solo ocultan supuestos trabajos en día y noche.    

En sectores de alta ocupación y tránsito peatonal, en andenes no siempre amplios, lo expendido está ofrecido al aire no puro, y, seguirá.

Para el consumidor, según se observa, está primero el precio y, no siempre la preparación de lo ofrecido, sumado a la rapidez, para adquirir algo en camino al trabajo, vecino a venta ambulante.

La salubridad pública bien aplicada debería efectuar visitas periódicas a sitios de todos los niveles; Los que deberían desaparecer son los oscuros y denominados por el común como “chuzos”, en barrios y zonas céntricas, de edificaciones antiguas y, malos servicios públicos en zonas densamente pobladas, donde ocultan armas a instancias de delincuencia.

Las particulares profesiones que el hombre desarrolla en el ámbito de la organización social del trabajo han perdido el mantener modelo ideal de humanidad para hacer valer leyes y realización de planes efectivos generadores de empleo productivo para mujeres y hombres en edades con suficiente recurso físico, mental y creativo.

Como precisa el catedrático Gatti: en los lugares ocupados por violencia está activa la relación de lo ilegal con la ciudadanía, desconociendo verdades objetivas. Así se ratifica el acercamiento del covid a todo lo delincuencial.