Los bancos de la zona euro se aprovisionaron generosamente en liquidez en el Banco Central Europeo (BCE), que les otorgó préstamos a tres años.
Estos préstamos son por casi 500.000 millones de euros, pero la operación, según los economistas, no resuelve todo y desestabilizó a los mercados.
Para el BCE, que llevó a cabo por primera vez una operación de este tipo, fue un éxito. En total 523 bancos de la zona euro se precipitaron a su mostrador para obtener la suma histórica de 489.000 millones de euros en préstamos.
Aunque divididos, los economistas preveían una demanda entre 100 y 500.000 millones para esta operación en la que el BCE ponía sumas ilimitadas a disposición. Los bancos podían obtener cuanto dinero necesitasen con la condición de tener la contrapartida en garantías para el BCE.
La inyección neta en el sistema bancario europeo luego de la operación es de menos de 200.000 millones de euros, el resto corresponde a préstamos a una semana, tres meses o un año, que los bancos no renovaron estos últimos días en vistas de esta operación especial.
Esta liquidez es bienvenida por los bancos de la zona euro, que tienen importantes necesidades de refinanciamiento para 2012 y mucha dificultad para encontrar los fondos en el mercado en donde los inversores no les tienen confianza.
Más de 600.000 millones de deuda bancaria vencen en 2012, de los cuales 230.000 millones sólo en el primer trimestre, recordó el presidente del BCE Mario Draghi.
"Con una ayuda tan generosa, el espectro de bancarrotas de las instituciones financieras por problemas de liquidez debería alejarse, y hacer desaparecer uno de los riesgos que podrían provocar un deterioro de la crisis de la deuda", señaló Christian Schulz del banco Berenberg.
El BCE espera principalmente que los bancos utilicen este dinero para prestar a los hogares y empresas de la zona euro y evitar el derrumbe del crédito que sería devastador para la economía.
Las Bolsas europeas y el euro saludaron este resultado, pero revirtieron luego la tendencia al estimar algunos analistas que la importancia de la operación era más bien de mal augurio para la solidez de los bancos.
"Los corredores intentan evaluar la significación de la importancia del préstamo acordado por el BCE para la salud del sector bancario de la región", estimaban los analistas de Charles Schwab en Nueva York.
Hacia las 17H00 GMT Wall Street cedía en Nueva York. En París el CAC 40 cerró perdiendo 0,82%, Fráncfort perdió 0,95%, Madrid 0,90% y Londres 0,55%.
Parece poco probable que la inyección de liquidez sirva para aliviar a los Estados frágiles de la zona euro, como lo esperaban algunos en el Eurogrupo, como el presidente francés Nicolas Sarkozy.
En el papel, la liquidez levantada por los bancos a bajo costo puede ser lucrativamente reinvertida en bonos de Estado, algunos ofrecen tasas muy interesantes.
Pero "dudamos de que el dinero sea utilizado principalmente en comprar deuda periférica", estimó Martin van Vlie de ING.
La mayoría de los grandes bancos tienen otras prioridades, como cubrir sus propios vencimientos, y no desean comprar activos de riesgo que podrían costarles una rebaja en su nota de calificación financiera, según Schulz.
Primer signo alentador sin embargo, España aprovechó el martes de la distensión en los mercados para colocar más bonos de lo previsto a tres y seis meses por 5.640 millones de euros con una tasa que bajó fuertemente.
Las tasas a 10 años de España, que cayeron este miércoles por la mañana por debajo de 5% por primera vez desde octubre, se situaban a 5,097% (contra 5,030%).
Al final de cuentas, la operación a tres años "no va a salvar la zona euro", estimó Jonathan Loynes, de Capital Economics.
"Las sumas en juego no se sustituyen a las compras más importantes, o a las garantías, que los mercados esperan del BCE", agregó.
Desde hace meses la entidad de Fráncfort está bajo presión para que resuelva la crisis comprando masivamente títulos de deuda. Pero se rehúsa a hacerlo ya que lo considera contraproductivo y evoca su independencia así como la prohibición del Tratado Europeo de financiar a los Estados.
AFP