El Bayern Múnich derrotó a la Juventus por 2-0, este martes en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el Allianz Arena de la capital bávara.

El lateral austriaco David Alaba abrió el marcador a los 25 segundos del partido con un disparo lejano que sorprendió a Gianluigi Buffon y Thomas Muller marcó en la segunda parte (63).

El líder de la Bundesliga, que podría ganar matemáticamente el campeonato el próximo fin de semana, se mostró muy superior al primer clasificado de la Serie A y dispuso de más y mejores ocasiones ante la portería contraria.

El partido de vuelta se disputará en Turín el próximo 10 de abril (18h45 GMT).

El Bayern comenzó golpeando desde el inicio. A los 25 segundos del comienzo del encuentro, el balón llegó a David Alaba, tras un mal rechace de Andrea Pirlo, y el lateral austriaco disparó desde 40 metros y la pelota, después de tocar en el pie del chileno Arturo Vidal, tomó un extraño efecto y Gianluigi Buffon no pudo atraparlo.

Ese gol tempranero, sin embargo, no descompuso a la Juventus, que comenzó el partido dominando el balón ante un Bayern que jugaba replegado y buscando rápidos contraataques para castigar a la defensa italiana.

A los once minutos, Pirlo estuvo a punto de rehacerse de su error en el gol y lanzó un golpe franco directo que se marchó unos centímetros por encima de la portería de Manuel Neuer.

Al cuarto de hora, el delantero alemán Toni Kross se lesionó solo al defender un balón y tuvo que ser sustituido por el holandés Arjen Robben, que estuvo a punto de marcar el segundo, pero su remate a centro de Muller se fue fuera por poco (32).

Pese a que la Juventus parecía controlar el juego, no llegaba con demasiado peligro a la portería alemana, mientras que en cada llegada de los locales el gol rondaba sobre la portería de Bufon.

En el 36, fue el croata Mario Mandzukic el que no llegó por centímetros a un centro de Franck Ribery.

Schweinsteiger casi lo logró en un disparto desde fuera del área en el 42.

La Juve solo creaba peligro en los lanzamientos de faltas o córner de Pirlo, y en una de esas jugadas el defensa Bonucci a punto estuvo de empatar, pero su remate de cabeza se marchó alto (45+1).

Al descanso, la superioridad alemana no solo se reflejaba en el marcador (1-0), sino también en las estadísticas. El Bayern disparó 10 veces a la portería de Buffon, mientras la Juve lanzó en tres ocasiones y ninguna de ellas entre los tres palos (21-7 al final del partido).

La segunda parte comenzó como la primera, con un disparo lejano de falta de Alaba, aunque en esta ocasión Buffon pudo despejar con dificultades.

El segundo gol alemán llegó en el minuto 63, cuando Muller remató desde el área pequeña un centro de Mandzukic.

Tras ese gol, Antonio Conte movió el banquillo tratando de dar más mordiente a su equipo. El montenegrino Mirko Vucinic y Sebastian Giovinco saltaron al campo para sustituir a la pareja atacante Alessandro Matri y Fabio Quagliarella, que habían intervenido muy poco en el partido.

Con los cambios, la Juventus incrementó el dominio del juego y Vidal tuvo una doble oportunidad consecutiva para haber marcado (70).

El Bayern, no obstante, controló en todo momento el partido, no dejó que la Juventus crease ocasiones peligrosas de gol y pudo sentenciar la eliminatoria en el minuto 89 con un disparo de Muller que detuvo Buffon y en el rechace, el internacional alemán envió el balón alto.

Con este resultado, el Bayern encarrila su pase a semifinales y mantiene el objetivo de lograr el triplete (liga, copa y Champions) antes de que se siente en el banquillo en la próxima temporada el exentrenador del Barcelona Pep Guardiola.