La bancada de Gobierno y la oposición tendrán un nuevo enfrentamiento en el Congreso. Será en la Comisión Tercera de la Cámara de Representantes donde se debatirá el proyecto que busca adoptar una reforma tributaria estructural al impuesto nacional del carbono, con el fin de disminuir las emisiones de CO2, impulsar el uso de energías limpias y apoyar la implementación del Acuerdo de Paz, especialmente los programas de sustitución de cultivos ilícitos en el país.
El representante David Racero (Lista de la Decencia) destacó que, aunque el Presupuesto General de la Nación del 2022 definió que el 100% de este impuesto sea transferido y administrado por el Fondo Nacional Ambiental, cree que estos recursos deberían retornar al Fondo Colombia en Paz (FCP) para dar cumplimiento a lo pactado en 2016.
“Es necesario que se modifique la destinación de los recursos obtenidos del impuesto al carbono y se apoye, de manera directa, los compromisos adquiridos bajo la firma del Acuerdo de Paz, fortaleciendo los ejes, programas y proyectos que promuevan la construcción de la paz, la restitución de cultivos ilícitos, la reparación a las víctimas del conflicto armado y las políticas de desarrollo agrario integral”, expresó el congresista.
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Asimismo, resaltó que en las últimas mediciones a la calidad del aire, el 80% de la contaminación proviene de fuentes móviles como camiones, volquetas, motos, buses y taxis, y el restante se origina en fuentes fijas como industrias, chimeneas, quemas y la minería, por lo que “es evidente que se requieren de acciones políticas y sociales que disminuyan las muertes por contaminación ambiental y que mitiguen el cambio climático en el país”, afirmó.
Por otro lado, el congresista Óscar Darío Pérez (Centro Democrático) aseguró que la propuesta impulsada por Racero ya se había debatido en anteriores legislaturas, por lo que advirtió que en vez de respaldar el Acuerdo, lo que hace es perjudicarlo. “Esto genera que sea desgastante e innecesario volver a debatir la destinación de unos recursos que ya previamente se encuentran comprometidos a un programa particular”, enfatizó.
Además, el representante sostuvo que “la creación o modificación de múltiples impuestos podrían conducir al desorden tributario, puesto que el cambio en las bases gravables y la constante reforma a la destinación de las cargas tributarias tienen una incidencia proporcional y directa en la seguridad tributaria de la nación”.
Finalmente, Pérez dijo que “al combinar argumentos como un panorama político adverso por cuenta de la reciente tensión social que trajo la reforma tributaria, la salida del actual Gobierno nacional, la multiplicidad de impuestos existentes y las afectaciones al acuerdo de paz, consideramos que actualmente no sería oportuna la aprobación de este proyecto”.