Una solución integral para superar los inconvenientes que viene presentando la vía al Llano, desde hace más de tres décadas, prometió el viceministro de Infraestructura, Manuel  Felipe Gutiérrez, en Villavicencio.

Gutiérrez afirmó que la entidad realizará un estudio para definir lo que está sucediendo en la vía para así establecer una hoja de ruta sostenida que garantice soluciones a largo plazo.

El Viceministro, que realizó un sobrevuelo por la vía, manifestó que la prioridad será reabrir lo más pronto posible la carretera en condiciones de absoluta seguridad.

“Estamos trabajando en dar una solución, nuestra obsesión es habilitar la vía lo más pronto posible. Nos preocupa lo que sucede en los puntos críticos de los kilómetros 64 y 58. Y ahora lo que buscamos es una solución integral que permita tratar integralmente los diferentes puntos críticos que existen en la vía Bogotá - Villavicencio”, dijo.

En la rueda de prensa, a la que asistió también la gobernadora del Meta, Marcela Amaya García, el Viceministro hizo un análisis punto por punto de los tres lugares más críticos de la vía, que son los kilómetros 46, 58 y 64.

“Desde que entramos al gobierno teníamos un par de puntos críticos, como lo son los kilómetros 46 y 64. Nos comprometimos a entregar el kilómetro 46, que estuvo 10 meses cerrado, y lo entregamos antes de Semana Santa (…) El Instituto Nacional de Vías realizará la prolongación de lo que se llama Túnel Falso, que será una solución permanente”, afirmó.

“En el kilómetro 64 se están realizando una serie de terrazas muy importantes para evitar los derrumbes. Siempre hemos dicho que esa obra lleva tiempo. El punto que falló es un lugar en el que no hemos intervenido. Debemos seguir construyendo para poder dar solución definitiva. Una vez tengamos los estudios seguiremos adelante con la prolongación del túnel”, agregó.

En relación sobre el kilómetro 58, Gutiérrez reconoció que hay inconvenientes que se han agravado recientemente y preocupan mucho. Anunció que se necesitarán cerca de $20 mil millones para solucionar los inconvenientes presentados en el punto más crítico de la vía donde el pasado jueves cayeron 6.000 metros cúbicos de tierra.

De igual forma, el Viceministro reiteró que lo más importante es evitar que la vía se cierre ya que eso es algo que preocupa a toda la comunidad del Meta. “Nuestro trabajo es buscar soluciones y atender cada punto crítico de la vía”, dijo.

La carretera que une a Bogotá con Villavicencio cumple hoy ocho días con cierres parciales durante varias horas debido a la caída constante de material rocoso y lodo en algunos tramos.

Coviandes, concesionario que maneja la vía, señaló que un estudio técnico estableció que un complejo industrial avícola, ubicado en la parte alta de la montaña, sería responsable en gran medida de los deslizamientos de tierra.

“Es necesario que la opinión pública conozca que los impactos que han deteriorado la meseta, bajo la que está construido el Túnel 13, no son causados por Coviandes. Dichos impactos, al parecer, no fueron previstos por las autoridades competentes que concedieron los permisos de construcción y funcionamiento industrial en un frágil ecosistema”, señaló el concesionario en un comunicado de prensa.

El concesionario solicitó inversión del Gobierno en los tramos afectados: “Las fuertes lluvias continúan afectando las zonas vulnerables de la vía que requieren de la inmediata asignación de recursos estatales para la mitigación, estabilización y control de los fenómenos de remoción en masa y deslizamientos”.

Anoche a raíz de la las fuertes lluvias se debió suspender la tarea de limpieza de la vía.