La disciplina de bancada hizo que la colectividad votara a favor la iniciativa en Senado.

Por Gabriel Sonny Cubillos
Periodista de EL NUEVO SIGLO

Si bien la senadora Gilma Jiménez considera que el referendo de cadena perpetua para abusadores de niños no está hundido, después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) conceptuara que no puede ser convocado por recolección de firmas sino por una ley, en la batalla que la legisladora se ha fijado para sacarlo adelante no la acompañará el Partido Verde.

En ese sentido la representante Ángela Robledo le dijo a El NUEVO SIGLO, unos días antes de que el pasado miércoles el CNE hiciera público el concepto en el sentido que los referendos tienen que pasar por el Congreso, que “la verdad que yo fui una de los que no lo apoyé, pero igual estaba el concepto del Defensor, del Procurador, de la Fiscal, de la Comisión Asesora de Política Criminal; incluso el Gobierno no estuvo para nada presente en el debate. Entonces, yo pienso que no había ambiente en el país para el referendo de la cadena perpetua”.

La representante Robledo agregó que “este nunca fue un proyecto del Partido Verde, es un proyecto que ella”, la senadora Jiménez, “radicó en el 2009, el Partido Verde apenas se configuró en octubre, va a ser dos años.

Entonces ese no ha sido un proyecto del Partido Verde. Tuvo el apoyo de congresistas del Partido Verde”.
Durante su tránsito por la Comisión Primera y la plenaria de Senado, el Partido Verde votó a favor del proyecto por medio del cual se convocaba un referendo para consultar a los colombianos sobre si están de acuerdo o no con castigar hasta con cadena perpetua a los abusadores y asesinos de niños menores de 14 años.

En este sentido aunque senadores como John Sudarsky no compartían este proyecto, votaron a favor en la plenaria considerando que el senador Jorge Londoño (codirector del Partido Verde), como ponente para los debates en la Comisión Primera de Senado y en la plenaria, firmó la ponencia positiva.

En consecuencia, el representante Alfonso Prada es el único de los ocho legisladores verdes que ha apoyado irrestrictamente este referendo, teniendo en cuenta que, junto con Jiménez, integró el comité promotor del referendo que impulsó la consecución de cerca de dos millones de firmas que respaldaron la presentación de este proyecto al Congreso.

Camino de espinas

El primer proyecto que convocaba un referendo para consultar sobre la cadena perpetua, radicado por Jiménez en calidad de vocera de esta iniciativa, fue aprobado por el Congreso, pero luego la Corte Constitucional tumbó esta ley en mayo de 2010 al considerar que se dio inicio al trámite legislativo sin la certificación que entrega la Registraduría en cuanto a que respetaron los topes de financiación.

En segundo lugar porque el Congreso (en Senado) modificó el texto original, al cambiar la expresión “procederá” por “se podrá imponer hasta la pena de prisión perpetua”.

En diciembre pasado, la senadora Jiménez radicó nuevamente el proyecto en el Congreso al considerar que los vicios señalados por la Corte eran subsanables.

Ya en su trámite la iniciativa logró apenas la votación suficiente para avanzar en la Comisión Primera y la plenaria de Senado, sin embargó naufragó en la Comisión Primera de Cámara, en su tercer debate, en donde contaba con dos ponencias negativas.

Tras este contraste, Jiménez acudió a un plan ‘B’: buscar convocar de forma directa el referendo sin que pasara por el Congreso, lo cual según ella era posible de acuerdo con el artículo 132 de la Ley 134.

En ese sentido pidió al registrador Carlos Sánchez certificara cuál es el número exacto de firmas que se necesitan para la convocatoria directa del referendo.

Frente a esta pregunta y teniendo en cuenta que no hay antecedentes sobre el particular, el Registrador consultó al CNE, que el pasado miércoles emitió un concepto (no vinculante) en el sentido que este referendo no puede ser convocado mediante la recolección de firmas sino por una ley.

Sin embargo, Jiménez no da su brazo a torcer, por lo que anunció que entablará una acción de tutela. “Tarde o temprano el pueblo colombiano va a tomar esa decisión”, remarcó la congresista.