El doble asesinato con saña de una reina de belleza y su pareja en una carretera turística conmovió a Venezuela, uno de los países más violentos del mundo, cuyo gobierno discute un plan de emergencia contra el crimen.
Mónica Spear, de 29 años y actriz de la cadena estadounidense Telemundo, y su pareja, Thomas Henry Berry, de 39 años, fueron acribillados a balazos dentro de su automóvil la noche del lunes, mientras la hija de ambos, Maya, de cinco años, resultó herida de bala y se encontraba este miércoles en condición estable.
Los asesinos "llegaron y los masacraron", explicó el presidente Nicolás Maduro al relatar lo sucedido a la finalista de Miss Universo 2005 y a su pareja, un venezolano nacido en Gran Bretaña y responsable de una agencia de turismo de aventura.
Según la reconstrucción, el vehículo de Spear y Berry cayó en una emboscada con fines de robo, ya que se detuvo tras golpear un objeto colocado sobre la autopista de Puerto Cabello (en el Caribe) a Valencia, la tercera ciudad venezolana.
En un país partido por las divisiones políticas entre chavistas y antichavistas y donde surgen polémicas por las diferentes cifras de inseguridad que manejan organizaciones no gubernamentales y las autoridades, el presidente pidió que no haya explotación política de este caso.
Las cifras de inseguridad se han multiplicado por cuatro en los últimos años, llevando a los venezolanos a atrincherarse en sus casas a la caída del sol, excepto un puñado de sectores donde permanecen restaurantes y cafés abiertos.
Condominios con seguridad privada, autos blindados, la proliferación de armas -con o sin autorización de porte- escuelas de defensa personal o la costumbre de no detenerse en los semáforos por la noche son algunas de las herramientas de la población de un país cuyas tasas de homicidio espantan y superan a las de países en guerra.
Los asesinatos en Venezuela, -según la mida el gobierno o las ONG-, van de 39 a 79 casos al año cada cien mil habitantes, cifra esta última que sería la segunda más alta del mundo.
"Quien quiera venir a matar va a recibir mano de hierro", había advertido Maduro al convocar a una reunión ayer a un centenar de autoridades locales, entre ellos gobernadores y alcaldes de los municipios más peligrosos del país para analizar medidas de urgencia.
Otro grupo de artistas preparó un documento que será entregado a la Asamblea Nacional (legislativo unicameral), en el que reseñan la angustia de un país sometido a la violencia frente a la inacción del Estado./AFP