La paraguaya Julia Marino, que solo pudo ser 17ª el martes en la prueba de slopestyle de esquí artístico de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi-2014, afirmó este miércoles a la AFP que "sentí que decepcioné a mi país".
El sueño de Julia Marino, primera paraguaya en participar en unos Juegos Olímpicos de Invierno, se evaporó eliminada en las calificaciones, con una caída en su segundo intento.
La joven de 21 años, nacida en El Chaco, pero criada en Estados Unidos al ser adoptada cuando tenía seis meses, no pudo luchar por las medallas ni acercarse al puesto doce que ocupa en el ránking mundial.
"Mi impresión inicial tras la competición el martes fue de pura decepción. Sentí como si hubiera decepcionado a mi país y a mí misma. Pese a caerme en la segunda tanda, que fue el momento más cruel del evento, tuve una sensación del deber cumplido", señaló la paraguaya.
"Di todo de mí misma y no tengo nada que reprocharme. Un día después me siento más positiva con la experiencia. Pasé el día con mi familia y me ayudaron a poner algo de luz a la decepción. Hice historia para Paraguay y me siento muy honrada de haber sido su primera participante en Juegos de Invierno", añadió.
En su experiencia en Sochi uno de los momentos más emotivos que permanecerán en su memoria fue llevar la bandera de Paraguay en la ceremonia de apertura.
"Nunca olvidaré el desfile en la ceremonia de apertura del viernes. Es un momento que me hace llorar. Caminar llevando la bandera de mi país en un estadio lleno de gente animándonos es un sentimiento que nunca había tenido antes. Estaba tan feliz de que Paraguay fuera finalmente parte de los Juegos de Invierno", explicó.
"Regreso a Estados Unidos este sábado. Me gustaría dar las gracias al pueblo de Paraguay por esta oportunidad. Darles las gracias por creer en mí. El gran apoyo y amor que sentí de todos fue increíble y verdaderamente me inspiró. Los mensajes que recibí me hacen querer conseguir más", indicó.
La joven paraguaya de 21 años, duodécima del ránking mundial, quiere corresponder al cariño recibido de Paraguay con una medalla en unos Juegos en el futuro.
"Esa motivación que me dieron todos me motiva para seguir trabajando duro para lograr el objetivo final que es una medalla en unos Juegos Olímpicos. Espero que yo pueda inspirar a la gente en Paraguay de que todo es posible, sin importar lo alta que esté la barrera para conseguir tus sueños", señaló.
"Sin el trabajo del Comité Olímpico de Paraguay y del Ministerio de Deportes nada habría sido posible. Estoy impaciente por volver a Paraguay pronto y reunirme con mi gente", concluyó.
Julia Marino, tras ser adoptada cuando tenía seis meses, solo regresó a Paraguay el pasado mes de noviembre, pasando diez días en su país de nacimiento.