Por Carlos J Murcia
Periodista de EL NUEVO SIGLO
El sexto debate a la Reforma a la Justicia se daría el miércoles 2 de mayo en la plenaria del Senado, manifestó el presidente del Senado Juan Manuel Corzo.
El senador Corzo aseguró que aún toca profundizar en algunos debates. Sin embargo, lo que quieren es que el proyecto salga con un equilibrio de poderes. “Creo que de este martes en 8 días debe entrar a plenaria del Senado, y se estaría debatiendo en la plenaria”. El presidente del Congreso manifestó que hay una responsabilidad grande ante el país de sacar una reforma ajustada no solo al Derecho internacional, sino al nacional.
Al ex magistrado Alfredo Beltrán le parece importante que se establezcan límites a las condenas de responsabilidad del Estado. “Eso era grave, porque era negar el acceso a la reparación a quienes hubieran sufrido daños antijurídicos por parte del Estado”.
Para Beltrán, el hecho de que el Procurador no investigue a los congresistas es un punto a favor con la organización democrática. Señaló que independientemente de quien ocupe el cargo es un funcionario de carácter administrativo, elegido por el Congreso y no está bien que un funcionario de esa categoría quede con la potestad disciplinaria de decretar la pérdida de investidura.
El senador Eduardo Enríquez expresó que la reforma es un avance fundamental, porque hay respeto mutuo entre los Poderes. Según Enríquez, lo que buscan es un equilibrio para los mismos. “Creo que todos debemos empujar a sacar una reforma justa y eficiente”. Enríquez señaló que los colombianos deben sacudirse del deshonroso puesto que se ocupa a nivel mundial. “Ocupamos el sexto lugar de tener la justicia más lenta y América el tercer puesto”.
Al senador Hernán Andrade no le agrada para nada el tema de los aforados y dijo que eso está por construirse, pero que se está avanzando en sacar una buena reforma y que por eso son 8 debates que se tienen que dar en el Congreso y resaltó que el mensaje claro que debe quedar es que quienes están siendo investigados por la Procuraduría continúan en los procesos. “El mensaje de que yo te elijo y tú me investigas no es bueno”.
Para la investigadora Elisabeth Ungar, es preocupante que se esté retrocediendo en lo que tiene que ver con pérdida de investidura y el conflicto de intereses. La politóloga advirtió que el escenario que se avecina es peor que cuando se estaba antes de la última reforma política.
“La figura de conflicto de intereses se debilitaría en la medida que los congresistas podrían llegar a votar proyectos que los afectan”, aclaró. Ungar dijo con toda claridad que otro tema de preocupación es que los legisladores sólo pueden ser detenidos una vez exista una sentencia.
Para Marco Romero, es bueno que el Procurador deje de investigar a los congresistas: “Realmente el hecho que el Procurador investigue a los congresistas genera un problema, porque en ocasiones hay distorsiones. Eso hay que resolverlo de una vez y yo sí estoy de acuerdo con ese tema”.
María Consuelo del Río, ex veedora de Bogotá, opinó que la iniciativa aprobada en la Comisión Primera es sacada de la manga del Gobierno y sostuvo que no está atendiendo los requerimientos de la Rama Judicial. “Me gusta que no exista intromisión del Gobierno para elegir al Fiscal y al Procurador. No me gusta que los funcionarios administrativos y notarios tengan funciones judiciales”. Advirtió que la propuesta de un acusador privado es fatídica, porque de una justicia privada a una justicia armada solo hay un paso. Puntualizó que le asusta que la reforma se esté ajustando a la conveniencia de los senadores y legisladores.
El director de Derecho Procesal de la Universidad Javeriana Julio Andrés Sampedro expresó que la reforma se debe mirar en el marco de una estrategia marco que el Gobierno ha planteado en el tema de la Justicia. “Hay que mirar este proyecto con un objetivo múltiple, y no hacia una dirección”.