Brasil se dispone a recortar hoy sus tasas de interés de referencia por novena vez consecutiva en un año, del actual 8 por ciento a un nuevo mínimo histórico de 7,5 por ciento, a fin de reactivar su alicaído crecimiento, golpeado por la crisis en Europa y la caída de la demanda de China, estiman analistas.
La política de reducción de las tasas de interés iniciada en agosto de 2011 busca alentar el crecimiento económico en momentos en que el Gobierno aguarda un alza del PIB de 3 por ciento en 2012, mientras el mercado vaticina apenas 1,73 por ciento.
"Esperamos que el Comité de Política Monetaria del Banco Central (Copom) recorte la tasa de interés básica (Selic) en otros 50 puntos de base a un nuevo mínimo histórico de 7,5 por ciento" al año, señaló el banco de inversiones Goldman Sachs en un informe divulgado el lunes.
Analistas del mercado financiero consultados semanalmente por el Banco Central también aguardan una reducción de medio punto de la tasa Selica, así como una reducción adicional de 25 puntos básicos más avanzado el año, lo cual dejaría la tasa en 7,25 por ciento.
"Nuestra expectativa es de un recorte de 50 puntos básicos, a 7,5 por ciento para dar más impulso a la actividad económica en un escenario de deterioro" del crecimiento y de la producción industrial, dijo a la AFP Felipe Queiroz, de la agencia de calificación de riesgo brasileña Austin Rating.
"Hoy la mayor preocupación del Banco Central no es la inflación, es el nivel de actividad económica", afectado por la crisis en Europa, la desaceleración del ritmo de crecimiento en China y la lenta recuperación en Estados Unidos, indicó.
Para Robert Wood, analista para Brasil de la Economist Intelligence Unit (EIU), "el aumento de los precios al consumo no impedirá al Banco Central recortar las tasas de interés en otros 50 puntos básicos".