Nada de nada…

No están muy contentos en la Casa de Nariño con los rumores sobre cambios en el gabinete, especialmente porque las versiones sugieren que saldrían varias mujeres de la nómina ministerial. Como se sabe, uno de los énfasis del presidente Duque desde el día uno de su mandato ha sido el de la equidad de género en el gabinete, al punto que fue el primero paritario en muchos gobiernos. Lo cierto es que termina otra semana con una vacante en la nómina ministerial, lo que llevó a un parlamentario muy cercano a la sede presidencial a perder una apuesta con un colega suyo. Había asegurado que antes de este viernes ya estaría superada la vacante en la cartera de Justicia y sería la tercera mujer en línea, después de Gloria María Borrero y Margarita Cabello.

Mutismo

Y hablando de esta última, la procuradora electa, algunos periodistas trataron de contactarla el pasado miércoles con el fin de que emitiera alguna opinión respecto al caso de abuso policial que se presentó en la capital del país y que desembocó en la muerte de un abogado tras un confuso incidente con dos agentes que trataron de neutralizarlo utilizando descargas de pistolas eléctricas. Sin embargo, fue imposible localizar a la exministra y expresidenta de la Corte, ya que desde que fue escogida semanas atrás como sucesora de Fernando Carrillo, que solo dejará el cargo en enero 15, Cabello optó por salirse del foco público, con el fin de no afectar la labor y vocería del saliente jefe del Ministerio Público.

20 años de prisión

Un exalto mando policial le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que los desórdenes del miércoles en la noche en la capital del país y otras ciudades, en donde hubo ataques sistemáticos contra CAI y estaciones de la institución armada “… no fueron un hecho aislado ni espontáneo”. Según la misma fuente, “… hay evidencia de que algunos grupúsculos radicales ya tienen un método planificado para infiltrarse y sembrar el caos en las ciudades cuando se anuncian manifestaciones populares, así sean de última hora”. Agregó que los ataques a los uniformados se hicieron con la clara intención de causarles daño y, en esa vía, debería llevarse a la justicia a los responsables y acusarlos de tentativa de homicidio agravada, terrorismo, concierto para delinquir y ataque a servidor público, lo que “… podría significar una pena de prisión superior a los 20 años”.

¿Toque de queda?

El miércoles en la noche, cuando la situación de orden público en Bogotá ya estaba saliéndose de control, se alcanzó a pensar en la posibilidad de decretar un toque de queda. Sin embargo, la idea se descartó porque, de un lado, ya estaba muy tarde para poder enviar a toda la ciudadanía a sus casas y, de otra parte, era claro que para cumplir con esa orden habría sido necesario militarizar la ciudad, una idea que se sabía no sería compartida por la Alcaldía. Lo cierto es que hay analistas que consideran que los desórdenes de esa noche fueron mucho más graves que los del 22 de noviembre del año pasado, cuando el entonces alcalde Enrique Peñalosa decidió implementar la medida de toque de queda ante la violencia en los paros y los rumores de saqueos en algunos sectores de la ciudad.