Como ente rector de estas entidades, el Ministerio de Justicia será “quien administre un gran sistema de información para todas las comisarías de familia, que permita conocer en tiempo real los históricos de las estadísticas de gestión”, precisó la viceprocuradora Adriana Herrera a propósito del proyecto de ley que radicó el Gobierno el 21 de julio.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cuáles fueron los antecedentes del proyecto de comisarías de familias que se presentó ante el Congreso?
ADRIANA HERRERA: La Procuraduría en el marco de sus funciones preventivas hizo, durante el año 2018, la segunda vigilancia superior a las comisarías de familia. Dentro de sus funciones puede revisar entidades, temas u oficios en general de las entidades gubernamentales que tienen que ver con los derechos fundamentales de las personas. En esa medida, en el año 2010, habíamos hecho la primera vigilancia, donde se hizo un diagnóstico de cómo estaban funcionando las comisarías, que repetimos en el año 2018.
ENS: ¿Qué se encontró en el diagnóstico?
AH: Encontramos que realmente las comisarías de familia son la puerta de entrada de la justicia familiar, porque si bien son entidades administrativas, cumplen funciones jurisdiccionales en materia de violencia intrafamiliar.
Estaban en una situación muy compleja con varios temas, primero con relación a la estructura y funcionamiento. Si bien, en todos los municipios tenemos comisarías de familia y en las ciudades grandes tenemos más de una, realmente no era posible cuantificar el déficit real que existe en comisarías de familia, de acuerdo a la gran demanda que se tiene. Ese fue el primer diagnóstico.
ENS: ¿Qué más se encontró?
AH: En la planeación territorial. Como las comisarías están en los municipios, su presupuesto y funcionamiento dependen de las administraciones locales. Y no habían estado en los últimos años dentro de las prioridades de la planeación territorial.
Igualmente el tema de la vinculación laboral. El tipo de vinculación y estabilidad tanto de los comisarios de familia, como de sus equipos interdisciplinarios, en donde encontramos que la mayoría de las comisarías no tenían los equipos interdisciplinarios completos. Igual la rotación de personal en las comisarías. En estos momentos tenemos 1.273 comisarías. En estudio tenemos casi mil. Lo cual nos permite saber el estado actual de las comisarías.
ENS: ¿Qué otros puntos analizaron?
AH: Estudiamos el nivel jerárquico de los comisarios. Se pueden tener unos que tienen nivel jerárquico muy alto, como son en Bogotá, Medellín, pero hay municipios en que el comisario es por prestación de servicios y muchos de esos municipios tienen una o dos personas.
ENS: Terminado este estudio, ¿qué se hizo?
AH: Entregamos este estudio al Gobierno nacional y en el 2019 hicimos un acuerdo con el Ministerio de Justicia para que a partir de esta vigilancia superior que hicimos, trabajáramos conjuntamente en la mesa técnica que tenía el Gobierno nacional, conformada por el Ministerio de Justicia, la Función Pública, el Bienestar Familiar, la Defensoría del Pueblo, la Consejería para la Equidad de la Mujer, el Ministerio de Salud, y la Procuraduría, en un proyecto de ley. Así con las recomendaciones que hicimos llegamos a la iniciativa que trabajamos durante un año y que partió de una evaluación que hizo el Ministerio Público.
ENS: ¿Qué funciones tienen las comisarías?
AH: Tienen muchas y muy complejas. Los alcaldes y concejos les asignan más funciones que no tienen que ver con las comisarías de familia. Y no pueden prestar bien sus servicios. De los 22 artículos del proyecto, 12 están relacionados con el diseño institucional de las comisarías. Construimos el proyecto con comisarios de familia, con organizaciones de mujeres en Bogotá, organizaciones de niñez, tuvimos entrevistas con expertos y salió el primer proyecto.
ENS: ¿Ya se radicó el proyecto?
AH: El Gobierno ya presentó el proyecto. Si bien no recoge todas las recomendaciones, de manera general sí logró consolidar todas estas solicitudes que se hicieron a partir de las reuniones, de las visitas y la vigilancia superior para varias cosas; primero, para reconocer que las comisarías de familia conserven sus funciones jurisdiccionales. Se les crea un ente rector, porque el Ministerio de Justicia que tiene todas las competencias en materia de ente rector, pero no tenía una relación directa con las comisarías de familia, porque no estaba como ente rector: Entonces se determina que sea este para efectos de los temas jurisdiccionales y además quien administre un gran sistema de información para todas las comisarías de familia, que permita conocer en tiempo real los históricos de las estadísticas de gestión de estos establecimientos.
ENS: ¿Cómo queda el tema estructural?
AH: Se define una estructura básica y obligatoria para conformar las comisarías de familia, de tal manera que cuenten con los equipos básicos mínimos para que puedan operar.