El próximo viernes se realizará la segunda reunión de política monetaria del año, con la expectativa de los mercados del rumbo que se le dará a las tasas de interés.
Según el Observador Semanal del Departamento de Investigaciones Económicas de Bancolombia es que por mayoría la Junta Directiva del Banco de la República optará por mantener su tasa de intervención inalterada en 7,5 por ciento.
No obstante que en las últimas minutas los codirectores del Emisor coincidieron en que en el futuro la tasa de referencia deberá bajar, la entidad crediticia advierte que en este momento no están dadas las condiciones para avanzar en esta dirección.
La principal razón es que en el último mes las expectativas de inflación de los agentes (particularmente para el cierre de este año) se han seguido deteriorando y permanecen por encima del nivel objetivo de la autoridad monetaria.
A ello se suma el hecho de que posiblemente en febrero la inflación se acelerará por cuenta de las tendencias estacionales y el efecto del aumento en la tarifa del IVA.
Consideró el análisis de Bancolombia que con excepción de la pobre lectura de confianza del consumidor de enero (la más baja desde que se estableció esta medición) las cifras de actividad del cierre del año sugieren una leve aceleración, con la que el crecimiento del PIB estaría en línea con la expectativa del Banrepública.
En conclusión, los analistas creen que en el corto plazo la preocupación en torno al comportamiento de la inflación y de sus expectativas seguirá primando en las consideraciones de la Junta Directiva, con lo que la balanza se inclinará hacia una postura de cautela.
No obstante, es necesario advertir la alta incertidumbre que existe alrededor de las decisiones de política monetaria en el corto plazo, no solo por las posiciones divergentes al interior de la Junta, sino también por el cambio en la composición de la misma, con el reemplazo de por lo menos uno de sus miembros en los próximos días.
La inflación
De acuerdo con la encuesta de expectativas que realiza mensualmente el Banco de la República a los analistas económicos, la proyección promedio de inflación mensual en febrero es de 1,16 por ciento.
El resultado se ubica 21 puntos básicos por debajo de la expectativa para este mes, 1,37 por ciento y 12 puntos básicos por debajo de la observada en febrero del año pasado, 1,28 por ciento.
La amplitud en los resultados explica la incertidumbre en torno al impacto del incremento en la tarifa general del IVA.
El rango de respuestas para la estimación final de febrero osciló entre un 0,63 por ciento y 1,70 por ciento. Esto refleja la variedad y magnitud de los factores que pueden condicionar el desempeño de los precios durante este mes.
De cumplirse la expectativa promedio de los analistas, la inflación 12 meses continuará su proceso de moderación, aunque la misma perdería fuerza. La expectativa media de inflación anual es de 5,35 por ciento, lo que equivale a una reducción de solo 12 puntos básicos frente al resultado anual del mes pasado (5,47 por ciento).
En contraste, la expectativa de inflación anual para febrero es de 5,57 por ciento, lo cual implicaría una aceleración de 10 puntos básicos frente al resultado de enero.
Las expectativas de inflación tanto de corto y mediano plazo se deterioraron. Después de la sorpresa alcista en los precios observada en el arranque del año, la proyección promedio para el cierre de 2017 aumentó 10 puntos básicos hasta 4,61 por ciento.
Estos resultados representan una preocupación importante para la autoridad monetaria, en la medida en que ponen de manifiesto la baja probabilidad de que al cierre de 2017 la inflación esté dentro del rango meta.
Ciclo corto
Según el excodirector del Banco de la República, Carlos Gustavo Cano, el ciclo bajista de la tasa de interés en Colombia sería breve y lento porque la inflación actual y las expectativas siguen siendo elevadas.
En diciembre de manera sorpresiva, la Junta Directiva del Banco de la República redujo en su tasa de interés de referencia por primera vez en casi cuatro años para apoyar la recuperación de la cuarta economía de América Latina, que se habría expandido alrededor de 1,8 por ciento el año pasado.
En enero, en una apretada votación el directorio del banco sorprendió al mercado al mantener estable el tipo en un 7,5 por ciento, debido a un incremento en las expectativas de inflación, amenazando con incumplir por tercer año consecutivo la meta de entre 2% y 4%.
"Estoy de acuerdo con que probablemente el ciclo bajista va ser más lento, mucho más cauteloso, porque los datos de inflación, no solo las expectativas de alza en la tasa de interés por parte de la FED, los datos de inflación últimos no han sido los más favorables", dijo Cano en una entrevista con medios internacionales.
La inflación en enero se situó en un 1,02 por ciento, un dato por encima de lo esperado por la media del mercado, con lo que el indicador acumuló un 5,47 por ciento anual.
Y en la encuesta del Banco Central del mes pasado, las expectativas de inflación para cierre de este año aumentaron a un 4,46%, desde 4,19% en el sondeo de diciembre.
"Creo que las expectativas de inflación inclusive en las circunstancias como las que vivimos pesan mucho más que el mismo dato de inflación observada", resaltó Cano, quien en enero votó a favor de dejar estable la tasa y será reemplazado este mes al cumplir 12 años en la junta, el periodo máximo permitido.
Pese a las presiones, Cano consideró que existe una "alta probabilidad" de que la inflación converja antes de final del año al rango meta, teniendo en cuenta que no hay presiones climáticas sobre los precios y que la moneda local, el peso, está en una fase de apreciación, dos de los factores que dispararon los precios en el 2015 y 2016.
En tanto, el saliente codirector estimó que la economía colombiana se expandirá alrededor de un 2,5 por ciento este año, superior a la proyección del banco emisor de 2 por ciento, ante la expectativa de una recuperación del comercio exterior, considerada una de las principales vulnerabilidades del país.