No estamos en la víspera de la paz: Castro | El Nuevo Siglo
Domingo, 28 de Diciembre de 2014

“Yo no me atrevería a decir qué tan lejos o qué tan cerca estamos. Ciertamente no estamos a la víspera. Se necesita todavía tiempo”, manifestó el arzobispo de Tunja, Luis Augusto Castro, presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana.

En cuanto a la necesidad de perdón, el prelado católico calculó que debe haber no menos de 28 millones de colombianos con alguna herida con los grupos armados presentes en el conflicto y que requieren ser motivados al perdón.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué tan cerca ve la paz en Colombia?

LUIS AUGUSTO CASTRO:Yo no me atrevería a decir qué tan lejos o qué tan cerca estamos. Ciertamente no estamos a la víspera. Se necesita todavía tiempo.

Creo que se han tocado muchos temas relacionados con la paz. Pero los temas más álgidos, más difíciles, son los que hay que enfrentar ahora.

Por eso toma su tiempo también y no es el caso de correr, simplemente por ahorrar tiempo, sino de llegar a unas soluciones bien diseñadas, donde no se acepte impunidad, pero que también se pueda aplicar la justicia transicional para salir del atolladero en el que estamos.

ENS: ¿No ha jugado la jerarquía católica un papel muy pasivo?

LAC:Estamos trabajando mucho en todo esto. Lo que pasa es que no tenemos la costumbre de hacer públicas todas las cosas que hacemos, porque no estamos interesados en ello.

Todo lo que tiene que ver con la paz requiere también una gran discreción. No ciertamente tomarlo como un objeto de publicidad, porque eso no ayuda en lo que se tiene que hacer.

ENS: ¿Cómo evalúa el cese el fuego unilateral e indefinido de las Farc?

LAC:Es como un signo que dan las Farc de que tienen buena voluntad para llegar al cese definitivo del fuego. Pero naturalmente es algo muy breve. Es algo que pasará con las fiestas y necesitamos llegar a ese cese definitivo que significa dejar las armas y que significa reinsertarse en la sociedad, que significa reorganizarse en la sociedad.

ENS: ¿Qué hacer para acompasar los procesos de paz de las Farc y el Eln?

LAC:Eso sí es un poco complicado.

Creo que los dos procesos van en ritmos diferentes. Evidentemente el proceso con la guerrilla de las Farc va mucho más adelantado. No es que las Farc y el Eln estén sincronizados, ni más faltaba.

Entonces creo que por ahora ni hablar a acompasar los dos procesos. Que cada uno haga su camino. Y tal vez, más adelante pueda ser posible que se llegue a un solo interlocutor, pero no en este momento.

 

 

Perdón

ENS: ¿Estará la sociedad colombiana preparada para perdonar?

LAC:Pues esa es una pregunta bastante complicada. Yo espero que sí. Pero la cosa no es tan sencilla, primero porque el perdón es algo siempre bien difícil.

Naturalmente las personas están llamadas a perdonar. El que no perdona queda como un resentido, una persona victimizada. Eso no está bien.

Por otra parte, si consideramos el hecho de que en el país tenemos 7 millones de víctimas inscritas y que cada víctima ha podido tener por lo menos 4 familiares afectados por lo que le pasó a esta víctima, si multiplicamos 7 por 4, son 28 millones. Es decir, la mitad de los colombianos que está llamada a perdonar, que está llamada a quitarse ese sentimiento de venganza, que es natural que surja, cuando una persona es pisoteada en sus derechos.

Es una tarea que hay que seguir haciendo y que naturalmente muchos están trabajando, incluida la Iglesia. Así que esperamos que se pueda llegar a que haya una purificación de la memoria, del corazón y se pueda llegar no solamente a una paz exterior, sino también a una paz interior.

ENS: ¿No cree que la polarización entre el santismo y el uribismo alrededor de la paz pueda terminar dando al traste con el proceso? 

LAC:Creo que cada uno tiene que aprender del otro. Me parece que obviamente el uribismo tendría que ser más sensible a las aspiraciones expresadas por el presidente Santos y por muchísimos de los colombianos.

Pero también el expresidente Uribe pone de manifiesto algunas situaciones, no de corto, sino de largo plazo, que hay que tomar en cuenta. Creo que harían muy bien los dos si dialogaran, si tomaran los puntos de vista de uno y de otro, y se enriquecieran mutuamente.

ENS: ¿Ve posible ese diálogo?

LAC:Sí, claro que lo veo posible. Habrá que motivarlos para que lo hagan en un momento dado. A mí me parece que el mismo mensaje de Luis Carlos Restrepo al expresidente Uribe es una invitación a que se sienten a dialogar.

ENS: ¿Los invitaría a dialogar?

LAC:Sí, claro. Pues no lo he hecho, pero lo manifesté públicamente: que me gustaría invitarlos a un almuerzo para que los dos dialogaran. Sí esperamos que se logre también llegar a un diálogo entre ellos.

<INTERTIT> Delitos conexos

<BODY TEXT> ENS: ¿Qué opina del debate en torno a que el narcotráfico es una conducta conexa al delito político?

LAC:Es un asunto muy complejo. Digamos que no el narcotráfico, sino ciertas ganancias del narcotráfico que se han utilizado para la guerra, por ejemplo, para la adquisición de armas, hagan parte del delito político, que es la rebeldía, la asonada y lo que ha sido la actitud de la guerrilla.

Sin embargo creo que en este punto es mejor que hablen los juristas que entienden mucho del asunto y ver cómo nos iluminan.

Es un hecho que el delito de las Farc es un delito político y que muchas cosas que hacen están conectadas al delito político. Eso es claro. No son delincuentes comunes y corrientes.

El narcotraficante es un delincuente común y corriente que busca llenarse los bolsillos. Y la persona que está en la guerrilla no tiene esa finalidad de llenarse los bolsillos, sino de hacer un cambio profundo en el Estado. Entonces es una visión completamente diferente. Y por eso ahí cabe hablar de delito político.

ENS: ¿No cree que se está hablando apresuradamente de posconflicto?

LAC:Creo que el posconflicto está entrando y tenemos que tomarlo muy en serio. El posconflicto no va a empezar el día que se firme en La Habana la paz. Eso indica que tenemos que trabajar.

El posconflicto nos hace enormes desafíos: desafío político, desafío económico, social, espiritual, entre otros.

Naciones que no se prepararon para el posconflicto tuvieron después más dificultades, más muertos, que las que ya se prepararon. Y creo que es importante tomarlo en serio.

ENS: ¿Qué piensa de la marihuana para uso medicinal?

LAC:La marihuana, como tantas otras cosas que pueden ser peligrosas, si están en manos de los médicos serios, de los médicos que entienden de todo esto y recetan eso, en algunos casos tendrá sus motivos de vida, no motivos de muerte. Entonces se puede aceptar.

Lo que pasa es que en eso de la marihuana medicinal puede ser para algunos abrirle una puertica para que se llegue a la marihuana de diversión, a la marihuana de puro gusto, no con fines medicinales, sino por fines de placer. Entonces ahí si estaríamos en un problema muy grave, porque la marihuana crea dependencia y va generando problemas en el organismo. Así que tendríamos generaciones más desbaratadas de las que podemos tener ahora.

 

Cadena perpetua

ENS: Otro de los temas que se está hablando es el tema de la cadena perpetua para los violadores de niños. ¿Qué piensa?

LAC:A mí no me gusta la cadena perpetua para nadie, porque a todo el mundo hay que darle la oportunidad de rehabilitarse. Puede ser que haya algunos casos muy especiales, donde no haya otra alternativa. Yo lo veo un poco complicado, tanto la cadena perpetua, como la pena de muerte, porque eso no le deja opción a una persona.

Toda persona, por el hecho de ser persona, tiene la posibilidad de cambiar. Esa puerta hay que dejarla abierta para todos.

ENS: La imagen y carisma del papa Francisco, ¿cómo se ve reflejada en la feligresía colombiana?

LAC:La feligresía colombiana tiene un cariño enorme por el papa Francisco.

Hace algunos días subí a un ascensor y una persona entró al ascensor y me dijo: “Monseñor, estamos muy bien de Papa”. Y yo le contesté: “Me gusta que esté contento con el Papa”.

Creo que el llamado a la sencillez, a la humildad, a la austeridad y a enfrentar los problemas álgidos de la Iglesia, y de la sociedad de hoy hacen que este Papa sea visto como muy cercano a la gente, y como muy cercano a todas las sociedades.

ENS: El Papa Francisco señaló 15 enfermedades de la Curia Romana. ¿Cuáles de ellas cree que son visibles en la Iglesia colombiana?

LAC:Lo que puedo decir es que la tarea que está haciendo el Papa en este sentido es muy importante.

Estuve con el Papa en el sínodo de la familia en el mes de octubre. Me di cuenta cómo él se está apersonando para que se hagan purificaciones en la Iglesia. De hecho, purificaciones en términos de misericordia para ayudar a la gente, para que nadie se sienta como marginada en la Iglesia. De manera que hay cosas muy interesantes que esperamos irlas realizando con la colaboración de todos.

ENS: Tras el sínodo y los pronunciamientos del Papa, ¿en qué está oficialmente la Iglesia en el tema de las parejas del mismo sexo?

LAC:Creo que por una parte a la Iglesia, y a cada uno, nos toca ser muy respetuosos de una persona gay. Es un ser humano. En el sínodo precisamente decíamos que habría que evitar hablar de personas homosexuales, como si el homosexualismo fuera parte sustancial de la persona. En cambio es una tendencia que una persona puede tener. Esto para decir que se tiene que ser muy respetuoso.