18 soldados de la Fuerza de Tarea Conjunta Omega, que forman el dispositivo de seguridad para las elecciones regionales, fueron secuestrados por una comunidad en zona rural de San José del Guaviare. 

Las Fuerzas Miliares denunciaron que un grupo de personas realizaron una asonada  contra la tropa, exigiendo el retiro de las unidades de la zona. Posteriormente, esta comunidad trasladó a los uniformados hacia Puerto Cachicamo.

"Por medio de una asonada, en la que se evidenciaron agresiones verbales y físicas hacia el personal uniformado, una sección de la unidad fue retenida de manera ilegal y fue conducida hacia Puerto Cachicamo. Lo anterior obstruyendo la misión constitucional de cara a los comicios regionales del próximo 29 de octubre", señalaron las autoridades. 

Las autoridades convocaron un consejo de seguridad extraordinario con las diferentes autoridades regionales, con el propósito de poner en conocimiento la situación y establecer las acciones conjuntas, coordinadas e interinstitucionales, que permitan recuperar sano y salvo al personal militar. 

Del mismo modo, señalaron que frente a estos hechos se tomarán las acciones legales pertinentes.

Asimismo, aseguraron que" a pesar de las agresiones, los uniformados han actuado en el marco internacional de los Derechos Humanos y conforme a los principales y valores institucionales". 

En las últimas horas, fuentes militares verificaron que a los soldados les quitaron sus dispositivos móviles y los víveres de su compra, incluyendo productos como enlatados, legumbres y pastas. 

También señalaron expresaron a través de un comunicado que “El comando de la Cuarta Brigada rechaza rotundamente estas actuaciones que obstaculizan la defensa de la soberanía, la independencia, la integridad del territorio nacional y del orden constitucional, acciones por vías de hecho en contra del personal militar que serán denunciadas en las instancias que corresponden”. 

Otras retenciones ilegales 

Cabe recordar que durante este año se han presentado varios hechos de este estilo, donde comunidades se retienen de la manera ilegal a los militares con el fin de sacarlos de la zona. 

Uno de esos casos se presentó en mayo, cuando fueron retenidos  28 uniformados en Patía, Cauca. 

Según indicó el Ejército Nacional, los militares pertenecían a una Brigada contra el Narcotráfico y se encontraban en el lugar desmontando laboratorios de cocaína.

El pasado mes de marzo, se presentó una situación similitar con 79 funcionarios de la fuerza pública, quienes fueron retenidos en San Vicente del Cagúan, Caquetá. Esta situación dejó un civil y un militar muerto identificado como Ricardo Arley Monroy