Ante el aumento de contagios en varios sectores de la ciudad, la Alcaldía decidió ampliar la zona de cuarentena a otras zonas de Kennedy y declarar a a otras cinco UPZ, como Zonas de Cuidado Especial.
La alcaldesa Claudia López dijo que la medida la adoptó por el alto riesgo de contagio en estos lugares y la declaró en la Unidad de Planeación Zonal (UPZ) Pardo Rubio, sector comprendido de las calles 45 y 62, entre la Avenida Circunvalar y la séptima (el entorno del Hospital Militar); así como en Puente Aranda, Britalia, Suba, Quiroga de la localidad Rafael Uribe y Bosa Occidental.
Así no sólo la localidad de Kennedy sigue bajo la lupa sanitaria sino estos nuevos sectores y las medidas buscan seguir frenando la expansión del coronavirus, basándose en la geo-referenciación.
Así, a las anteriores se suman las otras zonas de cuidado especial declaradas hace una semana: Bavaria, Calamdaima I y II, Kennedy Central, Corabastos y Américas. En estas 12 zonas residen 61.863 hogares con un total de 173.278 personas.
La Alcaldía destacó que en la zona de Kennedy donde se encuentra Corabastos fue necesaria declarar la alerta naranja, pues la cifra de contagios asciende a 942, lo que representa el 20% de los casos en Bogotá.
En estas Zonas de dicha localidad se han investigado 27 posibles nuevos contagios de Covid-19 en campo, 15 posibles brotes atendidos, 201 menores de cinco años han sido vacunados con esquema regular y se han impuesto 57 comparendos por no usar el tapabocas, entre otras acciones. Las nuevas medidas en esta localidad las asumió ayer el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, en un recorrido por estas Zonas de la localidad.
“Lo que está viviendo la localidad de Kennedy es una dura lección para todos de lo que pasa cuando se incumplen con las medidas de cuarentena y de bioseguridad. Hoy uno de cada cinco casos de Covid-19 se concentran aquí y solo cumpliendo con una cuarentena estricta durante dos semanas podremos lograr una contención efectiva”, precisó el Secretario.
Bioseguridad
“En este momento, el responsable de la curva de crecimiento del Covid-19 en la ciudad de Bogotá es la localidad de Kennedy y específicamente, la UPZ de Corabastos y Patio Bonito”. Así le aclaró a EL NUEVO SIGLO la alcaldesa Claudia López, quien explicó al detalle qué está adelantando la Administración Distrital a este respecto, pues el pasado martes, la Alcaldía Mayor tuvo que intervenir tanto la central de abasto como la UPZ que lleva su mismo nombre.
“El problema de Corabastos radica en que nosotros necesitamos que todos los usuarios de esta central salieran de su zona de confort. Como ellos tenían unos termómetros a la entrada, algunos jabones antibacteriales y como se habían lavado un par de bodegas, estaban convencidos de que ya habían tomado todas las medidas de bioseguridad y no. Esos son paños de agua tibia que no están funcionando ni al interior de la central de abastos ni por fuera del mismo”, le dijo la Mandataria a este Diario.
Por esta razón, desde el día de ayer la Alcaldía le insistió a esta central que sus medidas son insuficientes e incluso negligentes en algunos casos, y por eso se establecieron medidas serias y rigurosas para atender el alto riesgo de contagio en la zona.
“Les dijimos que tenían que reducir, por lo menos a la mitad, el número de personas que están ingresando a la central diariamente. Tienen que tener Pico y Cédula; tienen que no tener ventas ambulantes por dentro de la central y por ejemplo, tienen gel para los camioneros pero, ¿y los coteros qué? A ellos ni siquiera les prestan el baño. Para hacer uso del baño en Corabastos cobran y así uno no se va a cuidar porque no tienen cómo. Estas son personas muy humildes. Les cuesta alrededor de $1.000 hacer uso del baño entonces así no hay como cuidar a los coteros y zorreros”, añadió la alcaldesa López, quien reiteró que se deben tomar medidas más radicales cuanto antes, “pues Corabastos no se puede cerrar”.
Para dejar establecidas esas medidas, la Alcaldía fue tanto a la UPZ como a la gerencia de Corabastos, y puso a todo el mundo en modo de urgencia. “Ese era el tema: fuimos tanto por dentro como por fuera. Desde ya tenemos que empezar a ver cómo una parte de la distribución de alimentos entra derecho a las tiendas y supermercados, en vez de pasar todo por Corabastos”, puntualizó la Alcaldesa.
Esta fue una propuesta que el martes propuso el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García quien, de acuerdo con López, dijo que puso a disposición, a la entrada de la ciudad bodegas para que no se tenga que pasar por Corabastos.
“Estas son algunas de las medidas que se tienen que tomar y son medidas que la central no estaba considerando porque estaba en relativa tranquilidad a punta de gel antibacterial. El gel no mata al coronavirus y había que hacer cosas más serias. Ese es el contenido de lo que estamos haciendo allá”, finalizó diciéndole a este Medio la Alcaldesa.