Cuatro propiedades “que habrían sido complacientes con las actividades de las redes de explotación sexual de niñas y adolescentes, y la trata de personas con fines de esclavitud sexual en Cartagena (Bolívar)”, vinculados con la ‘Madame’ fueron ocupados con fines de extinción de dominio.
Se trata de los hoteles Sol de Mar, Mar Azul y Moroel, ubicados en Cartagena, así como The Epica House, que sería uno de los puntos más frecuentados por Liliana del Carmen Campos y cuyo valor comercial superaría los $84 mil millones.
“Los procedimientos corresponden a una nueva fase de la Operación Vesta, en la que han sido capturadas 18 personas, entre nacionales y extranjeros, y desarticuladas varias estructuras de proxenetismo y depredación sexual, que dejan algo más de 250 víctimas entre mujeres, niñas y adolescentes de Cartagena”, señaló la Fiscalía en un comunicado.
Al mismo tiempo el ente investigador anunció que fue identificada una estructura integrada por 14 ciudadanos israelíes y dos colombianos, que sería una de las responsables de las actividades de proxenetismo y explotación sexual en Cartagena, Santa Marta, Medellín y Bogotá. Ocho de los presuntos integrantes fueron detenidos en Colombia, contra los demás hay órdenes de captura internacional.
Hoteles, hostales y diferentes establecimientos comerciales de turismo, avaluados en $144 mil millones, fueron ocupados con fines de extinción del derecho de dominio.
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Los elementos de prueba dan cuenta que los paquetes que ofrecían eran promocionados exclusivamente entre nacionales de Israel, la mayoría empresarios y hombres que terminaban su servicio militar obligatorio en ese país. A su llegada a Colombia, los extranjeros cumplían tours en hoteles, hostales, fincas y yates, asistían a fiestas privadas de música electrónicas y diversos escenarios en los que primaba la esclavitud sexual de menores de edad, jóvenes y mujeres, y el consumo de licor y droga.
El andamiaje ilegal de esta estructura de proxenetismo fue descifrado luego de dos años de indagaciones, en los que fueron recibidos 21 testimonios de víctimas y realizadas 45 actividades de campo, algo más de 20 inspecciones judiciales, búsquedas selectivas en bases de datos y controles técnicos a las comunicaciones de los ciudadanos israelíes, entre otro centenar de técnicas avaladas judicialmente.
Las capturas se realizaron en Bogotá: dos israelíes y una mujer colombiana; en Santa Marta: dos israelíes y un colombiano; en Medellín: un israelí que fue puesto a disposición de Migración, y en Cartagena: un israelí.