La radicación del Plan de Ordenamiento Territorial en el Concejo de Bogotá, proyecto de acuerdo 338 de 2019, puso en marcha un reloj que se detendrá exactamente en 88 días, cuando el Cabildo Municipal tome una decisión frente a los próximos 12 años de Bogotá.
Durante una sesión a la que asistieron el secretario de Planeación Distrital, Andrés Ortiz; el secretario de Gobierno, Iván Casas, y que estuvo precedida por la presidenta del Concejo de Bogotá, Nelly Patricia Mosquera, se establecieron los procedimientos de los próximos tres meses de debate.
Así mismo, el Distrito se refirió a la importancia y los beneficios que le implicarán a la ciudad con este documento, y varios concejales de la oposición se refirieron al porqué de su oposición al mismo.
Procedimiento
“El Concejo de Bogotá se complace en contarle a la ciudadanía que el Plan de Ordenamiento Territorial ha sido radicado y a partir de este momento corren 90 días para discusión, negación o aprobación dentro del Cabildo Distrital”, Mosquera, quien poco después sostuvo que el sorteo de los ponentes se llevará a cabo hoy en horas de la mañana.
Adicionalmente, aunque refirió que por ley el Concejo está obligado a realizar un cabildo abierto para esta revisión de ordenamiento territorial, llevará a cabo dos en el Palacio de los Deportes. El primero de ellos el 30 de agosto a partir de las 9:00 a.m., y el segundo el 6 de septiembre en el mismo horario.
“Ese cabildo está única y exclusivamente para que los ciudadanos que se inscriban a partir de este momento y hasta el 27 de agosto, en la Secretaría General del Concejo de la cuidad, puedan participar. Quienes quieran hacerlo deben venir con su documento, inscribirse y traer del documento del que van a hablar en dicho cabildo. Ningún documento será aceptado después del 27 de agosto”, añadió la cabildante.
Aclarando a toda la ciudadanía que esté interesada en participar de las discusiones del Plan Nacional de Desarrollo, que el Cabildo Distrital le garantizará la discusión a todo aquel que quiera participar, puntualizó que tanto la oposición, como la bancada de gobierno, tendrán lugar en todas las discusiones durante los próximos 90 días.
“Nuestra tarea es garantizar que todos tengan las mismas garantías: desde el gobierno hasta el último ciudadano que quiera participar. Para escucharlos y debatir sobre los próximos 12 años de esta ciudad”, enfatizó.
Por último, la Presidenta del Concejo de la ciudad dejó claro que la corporación está obligada a cumplir la Ley de Garantías, y que precisamente por eso no se admitirá el uso de los micrófonos en la discusión del Plan de Ordenamiento Territorial para hacer campañas políticas.
“El Concejo de Bogotá debe salvaguardar la independencia de la ciudad y garantizar que todos puedan participar sin ningún logotipo de política en estos momentos. Por eso garantizaremos que la discusión sea lo más transparente posible”.
¿Qué piensa el Gobierno?
Por su parte el secretario de Planeación, Andrés Ortiz, se refirió a la extensa socialización que tuvo este proyecto y aclaró que el documento recogió toda la concertación ambiental que se estudió con la Secretaría de Ambiente y con la CAR. Por último, aclaró que… “hemos presentado hoy el trabajo de un esfuerzo concienzudo por cerca de tres años. Este proyecto de acuerdo que radicamos hoy es el resultado de un diagnostico detallado frente a lo que sucedió a la luz del Decreto 190 del POT vigente. Qué objetivos se lograron, que no se concretó… Un estado del arte de lo que deben ser las ciudades y los objetivos de desarrollo sostenible (…) Este es un proyecto de Acuerdo que trae una propuesta para sumir retos muy grandes como el aumento en 30.000 hectáreas de áreas protegidas, etc”.
Por su parte, el concejal Rubén Torrado señaló que lo que este POT busca es que una ciudad que ha crecido de manera desordenada se ordene, ya que en ciertas zonas se han venido desarrollando actividades que no habían sido permitidas. “Con este POT lo que se busca es legalizar esas actividades y que la ciudad tenga un orden, no para hoy sino para los próximos 15 años del suelo capitalino”, puntualizó.
¿Qué piensa la oposición?
Al finalizar la radicación, la concejala María Fernanda Rojas (Alianza Verde) entró al recinto con una pancarta en la que se leía: Peñalosa radica un plan de negocios no un plan de ordenamiento.
No al POT. De acuerdo con ella, las mayorías peñalosistas que le han aprobado todo al alcalde Peñalosa “seguramente le va a aprobar este Plan que afecta a la ciudad. Yo no veo que esa coalición se vaya a desbaratar en este momento y seguramente lo apoyará”.
“Por el lado de la ciudadanía hay una enorme preocupación y rechazo y malestar frente a esta propuesta. Es un POT altamente inconveniente que se fundamenta en proyecciones poblacionales falsas para justificar daños irreparables para la ciudad como la pésima idea de urbanizar ecosistemas estratégicos”, puntualizó el concejal Manuel Sarmiento.
Él cabildante, por último, añadió que era lamentable que el alcalde Peñalosa hubiera insistido en tramitar este documento en medio de las elecciones y reiteró que desde ya el Polo tiene anunciada su decisión de votarlo en contra. De acuerdo con él, el burgomaestre debería haber suspendido el trámite y debería haberlo dejado para la próxima administración.
“No lo va a hacer porque su intención es dejar amarrados esos grandes negocios y en estos tres meses va a valer sobre todo la fuerza de la movilización ciudadana y pacífica para pedirle a las mayorías que no se apruebe este proyecto. Hoy precisamente en el Concejo se reunieron un centenar de personas para protestar y pedirle al cabildo que no lo apruebe. El alcalde Peñalosa tiene una maquinaria y aplanadora grande pero la fuerza de la ciudadanía puede poner en aprietos la aprobación del POT”, finalizó diciendo.